Naiz

EH Bildu apuesta por perder el miedo para consolidar el cambio

El portavoz de EH Bildu, Adolfo Araiz, ha instado al Gobierno de Nafarroa y a los partidos que los sustentan a «perder el miedo» para avanzar con «audacia» y consolidar el cambio.

Adolfo Araiz ha reclamado un cambio «audaz y valiente». (PARLAMENTO DE NAFARROA)
Adolfo Araiz ha reclamado un cambio «audaz y valiente». (PARLAMENTO DE NAFARROA)

Durante su intervención en el debate de política general, y tras apuntar que el cambio político es fruto de los «deseos de libertad y justicia» de la ciudadanía, Araiz ha indicado que este es un proceso «gradual, de largo plazo», y en el que puede haber «contradicciones y tensiones», pero con un trabajo «en la misma dirección».

Y ha reclamado un cambio «audaz y valiente» al tiempo que «autorreflexivo» e «inteligente» para avanzar tras un año de «poner cimientos y revertir las políticas reaccionarias». Un reto en el que EH Bildu se ha mostrado abierto al consenso en las materias incluidas en el acuerdo programático firmado por el cuatripartito.

«Nuestra apuesta por la paz y la convivencia es clara», ha asegurado Araiz, que ha criticado la «estrategia del calamar» de los «inmovilistas» y ha pedido «honestidad» para que «las diferentes lecturas del pasado» no sean obstáculo para el futuro.

Por eso ha advertido que «será necesaria la crítica y la autocrítica» al abordar «las violencias» del pasado, «la de ETA y la de todos, incluida la del Estado».

Ha sostenido así la legitimidad de su formación frente a «vetos» y cuestionado las políticas «rastreras» de UPN «sostenidas» por el PSN y la búsqueda de «réditos políticos» con sucesos como el de Altasu.

Unas actitudes que ha rechazado y frente a las que ha apostado por una política que devuelva la ilusión a la ciudadanía, por una sociedad civil que es la protagonista del cambio, y por «superar el régimen» para sustituirlo por «otro mas democrático».

Al mismo tiempo a juicio de EH Bildu es preciso tener en cuenta las «inquietudes» de la sociedad navarra para que el cambio no pierda «energía e ímpetu».

«Hay claroscuros y no podemos caer en la autocomplacencia» porque el objetivo es «construir otra Nafarroa», y para lograrlo, ha dicho, hay que generar resistencias frente a la «contraofensiva del régimen».

«Sin prisas pero sin pausas» es el ritmo abertzale para un cambio «sin miedo y sin complejos», para que «el cambio sea hegemónico en todo los ámbitos políticos y sociales» y que «se convierta en irreversible».

El pilar de este proceso es para Araiz el acuerdo programático y 2017 debe ser clave en la profundización del mismo, que también se ocupa del Convenio Económico que se debe negociar con el Estado y para el que ha confiado en que los grupos parlamentarios «estén a la altura» ante lo que Nafarroa «está pagando de más» por las cargas estatales en tiempos de recortes.

Pero el cambio exige asimismo, en su opinión, «tocar los cimientos de la estructuras el régimen, construir una nueva convivencia», porque los navarros «nunca han podido discutir el Amejoramiento» acordado «entre las élites».

Una «libertad» que Araiz ha reclamado igualmente para las entidades locales a la hora de que estas pueden decidir sobre sus símbolos, y para el Parlamento por los sucesivos recursos de sus leyes ante el Tribunal Constitucional.

Para terminar, ha apostado por ver «la diversidad como una riqueza», dejar «atrás influencias del viejo régimen» e impulsar el trabajo «en común entre diferentes» y entre instituciones, partidos y ciudadanos.