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LAB acusa a Afapna de «chantaje» y pide al Gobierno que recurra la sentencia de la OPE

LAB ha acusado a Afapna de utilizar «el chantaje como instrumento de negociación» y ha pedido al Gobierno que recurra la sentencia que anula la OPE de cien plazas de maestro en euskara.

LAB acusa de «chantaje» a Afapna por su actitud ante la sentencia sobre la OPE de Educación.
LAB acusa de «chantaje» a Afapna por su actitud ante la sentencia sobre la OPE de Educación.

«Afapna es el único responsable de dejar en la inseguridad jurídica a 100 trabajadores y trabajadoras que con gran esfuerzo lograron una plaza en las oposiciones convocadas por el Gobierno de Navarra para desarrollar su práctica docente en euskera», afirma LAB en un comunicado.

Y añade que tras la «dudosa sentencia» dictada, Afapna adopta «el papel de perdonavidas» al anunciar que no pedirá su ejecución pero con la «condición» de que el Gobierno se siente a negociar con ellos, «y solo con ellos», y además no recurra la anulación de la OPE.

Esto «se llama chantaje y prácticas mafiosas», subraya LAB, y pide al Ejecutivo que «rechace estas coacciones y remita cualquier negociación a las diferentes mesas habilitadas», donde están representados todos los sindicatos elegidos por los empleados públicos.

Según la central abertzale, «Afapna tiene mucha experiencia de los tiempos de UPN en que tenía los despachos gubernativos abiertos para negociar todos los chanchullos», por eso espera que el actual Gobierno presidido por Uxue Barkos «les pare los pies y se niegue a reunirse, bajo amenazas, con la mafia sindical».

«El Gobierno de Navarra dispone de los medios necesarios para afrontar esta situación a la que ha llevado la irresponsabilidad de Afapna», destaca, y añade que «debe recurrir la sentencia, porque no olvidemos que cualquier persona interesada, además de Afapna, puede pedir la ejecución» y esto «podría dejar en inseguridad jurídica incluso las plazas de castellano».

LAB advierte además de que no tolerará «prácticas chantajistas ni ventajistas por parte del sindicato Afapna, que intentan conseguir por medios coactivos lo que no consiguieron en el proceso de elecciones sindicales».

Al respecto, agrega que Afapna «es el inquisidor de las políticas de normalización del euskera, y veta los derechos de una población que apuesta por la convivencia de las dos lenguas oficiales de Nafarroa en condiciones de igualdad y seguridad jurídica».

Una estrategia sindical, concluye LAB, que «no tiene nada que ver con las necesidades del sistema educativo o los argumentos técnicos y pedagógicos, sino que prevalecen los objetivos políticos de este sindicato anti-euskaldun tan cercano a lo más rancio del régimen representado por UPN y los poderes más retrógrados de Nafarroa».