Los manifestantes han partido de la plaza de la Cruz portando telas blancas con las iniciales de los trabajadores y las localidades en las que se han registrado los accidentes laborales mortales del último año en Nafarroa.

Desde allí, se han dirigido hasta la sede de la Confederación de Empresarios de Nafarroa y han finalizado la marcha ante el Parlamento, donde han extendido las sábanas en el suelo y han depositado claveles encima de ellas.

El coordinador de ELA en Nafarroa, Mitxel Lakuntza, ha señalado a Efe que éste es «un problema de primer orden social», que hay que visibilizar, y ha hecho un llamamiento al Gobierno de Nafarroa a que «tome medidas concretas en este problema».

El Gobierno de Nafarroa, ha declarado, «tiene que situar este problema como una prioridad y no puede contemporizar con una cuestión de este tipo, que exige un esfuerzo y una centralidad mayor».

Por ello, ha dicho, los sindicatos exigen un «plan de choque» en el que tengan «mayor fuerza» elementos como el control, las sanciones o la propia inspección.

Lakuntza ha subrayado que el «origen» de este problema, «que se encuentra detrás de cada accidente de trabajo y de cada enfermedad profesional», tiene que ver «con la calidad del empleo, con la desregulación del mercado de trabajo, subcontrataciones, eventualidad, reforma laboral y extensión de la precariedad».

Además, ha agregado, «hay otro factor que suele pasar desapercibido y que está detrás de muchas enfermedades profesionales y muchos accidentes», que es el incremento de los ritmos de trabajo, «el que prevalezca la productividad y el ansia de los beneficios por encima incluso de la salud de los trabajadores».

El tercer factor que incluye en la siniestralidad, ha explicado, es «la falta de prevención, que las empresas no actúen como deberían» en este ámbito.

Por su parte, el coordinador general de LAB en Nafarroa, Igor Arroyo, ha indicado a Efe que «la máxima responsable de esta situación es la patronal», que «habla de diálogo social, de concertación, de términos pomposos y bonitos, pero en la realidad está imponiendo unas políticas que están agravando y deteriorando el estado de salud de los trabajadores y trabajadoras».

«La precariedad que están imponiendo como consecuencia de la reforma laboral es la principal responsable de ese deterioro de la salud laboral», ha aseverado el dirigente de LAB, que ha apuntado que la marcha ha terminado ante el Parlamento porque «las instituciones navarras también tienen que actuar y tienen que tomar medidas».

El Parlamento de Nafarroa, ha comentado, «ha hecho una serie de declaraciones, ha expresado su preocupación por el tema, ha instado al Gobierno a tomar medidas, a hacer un plan de ‘accidentes cero’», pero no considera la siniestralidad como una «prioridad».

Para Arroyo, el Gobierno de Nafarroa «no está haciendo la tarea, no está invirtiendo en prevención, en lo público, en el propio servicio de salud laboral, porque es ahí donde se tienen que desarrollar las actividades de prevención y de vigilancia de la salud».

En ese sentido, ha asegurado que, mientras Nafarroa no tenga las competencias en materia de inspección y pueda legislar sobre esta materia, «difícilmente va a poder terminar con este fenómeno».

«Se debe actuar desde lo publico en clave de prevención, pero junto con ello pensamos que hay que abrir el debate sobre una inspección de trabajo propia y una legislación laboral propia en Navarra», ha concluido.