La hipótesis de una posible mediación entre el Gobierno español y el catalán para desbloquear la situación sigue tomando fuerza. El president, Carles Puigdemont, apostaba abiertamente por esta opción desdel el primer día tras el referéndum y las propuestas no se han hecho esperar. Las últimas en conocerse llegan desde Suiza y desde la Comisión Independiente para la mediación y el diálogo, impulsada, entre otros, por el Colegio de la Abogacía de Barcelona.

En días anteriores se hablaba, asimismo, de conversaciones con la Iglesia y propuestas de crear una mesa de diálogo por parte de partidos políticos como Podemos o PNV.

Es en Europa donde se ha puesto el foco principal. Ayer por la mañana se difundía a través de la radiotelevisión pública de la Suiza francófona (RTS) que el Departamento Federal de Asuntos Extranjeros de Suiza (DFAE) está dispuesto a poner en marcha una plataforma de diálogo entre el Gobierno español y las autoridades catalanas.

Según la misma fuente, el DFAE ha respondido a la petición del Govern ya que estudia «todas las demandas de mediación que le llegan y que responde positivamente en la medida de lo posible». No obstante, el responsable del Departamento, Didier Burkhalter, evitó realizar cualquier comentario añadido sobre este tema. Y es que, según explicó, un exceso de transparencia podría comprometer el proceso.

La oferta de mediación por parte del país helvético, con una asentada cultura de referéndums, por cierto, fue confirmada a través de Twitter po el diputado del Partido Socialista Mathias Reynard: «Suiza se ofrece a hacer la mediación entre Madrid y Catalunya. Es lo que demando desde hace meses. Excelente noticia», señalaba.

A falta de más información sobre la propuesta, la RTS apuntaba que el sistema federal suizo podría servir de modelo para alcanzar una solución en la relación de Catalunya con el Estado español.

Tras conocerse la noticia, el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, optó por no confirmar ni desmentir la información, afirmando que «en todo caso se irá comprobando y alguien confirmará la fuente». En una entrevista en Catalunya Radio, también destacó que hay muchas personas, entidades y grupos que se han ofrecido para mediar.

Por su parte, el Gobierno español se apresuró a restar importancia a la propuesta llegada de Suiza. Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación negaron, a través de una portavoz, que Suiza se haya ofrecido a mediar entre el Ejecutivo de Mariano Rajoy y Catalunya para resolver la actual crisis.

Reunión con Puigdemont

Muestra de que la agenda de contactos para establecer un equipo mediador continúa, el president, Carles Puigdemont, recibía por la tarde en el Palau de la Generalitat a la Comisión Independiente para la mediación, el diálogo y la conciliación, constituida el pasado 4 de octubre por más de 70 entidades y 250 personas a título individual.

Al témino del encuentro no hubo declaración de las partes, como sí estaba previsto en un principio. La decisión de no comparecer públicamente coincide con la línea de prudencia mostrada por el Govern tras el referéndum. De hecho, fuentes de las dos partes justificaron la anulación de la rueda de prensa prevista en que quieren actuar con «discreción», para que el proyecto tenga continuidad, y se limitaron a señalar que el encuentro fue bien. Posteriormente, la comisión emitió un breve comunicado con las líneas generales planteadas en la reunión.

En la nota, la comisión, liderada por la decana del ICAB y presidenta de la Comisión de Mediación de la Federación de los Colegios de Abogados de Europa, Maria Eugènia Gay, considera imprescindible encontrar una salida a la situación actual basada en el diálogo y en la conciliación.

Tras ofrecerse para abrir puentes al diálogo, destaca que esto «debe pasar de manera necesaria por excluir cualquier solución unilateral, respetando el funcionamiento ordinario de las instituciones de autogobierno de Catalunya y descartando decisión que afecte al modelo político organizativo autonómico». También propone restablecer las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Catalunya, con miles de efectivos trasladados a todo el territorio, a la situación anterior.