Martxelo DÍAZ
BARCELONA
Elkarrizketa
ALBANO DANTE FACHÍN
DIPUTADO DE CSQP Y COORDINADOR GENERAL DE PODEM

«Dijimos que había que articular una mayoría social más amplia»

No puede ocultar su malestar con las palabras de Carolina Bescansa y defiende que Podemos apuesta por un Estado plurinacional. Rechaza una declaración de independencia, pero apoya a la gente, a quienes sufrieron la represión el 1-O.

¿Cómo están viviendo esta semana la amenaza de la aplicación del 155?

En primer lugar el PSC lleva días diciéndole a Puigdemont que convoque elecciones para que no apliquen el 155. Pero al cabo de un rato sale Pablo Casado (PP) diciendo que aunque se convoquen elecciones lo van a aplicar. El Partido Socialista tendría que explicar qué ha hecho, porque ahora dice que se opondrá. ¿Dónde? ¿En un Senado en que no tiene mayoría?. El Partido Socialista ha abierto la puerta para que el PP haga cualquier desastre. Aunque se pongan las manos en la cabeza, ellos le han abierto la puerta. No sabemos si es evitable el 155. Se pone al Gobierno de la Generalitat en una situación que no tiene mucho sentido. ¿Qué tienen que hacer? Al final se ve que lo que busca el PP es rendición absoluta. Es algo bastante inútil. Destituyen al Govern, intervienen TV3.... ¿van a hacer desaparecer a dos millones y medio de personas? Eso no va a pasar. Son unos inútiles. ¿Qué va pasar mañana [hoy]?

Lo digo sin retranca, pero el Gobierno catalán tiene que aclararse. Es una convocatoria de Pleno muy genérica. A partir de ahí, no lo tienen claro. No lo digo por señalarlos. Hacer política con una espada de Damocles que te puede llevar a la cárcel es muy difícil. Lo respetamos, pero había algunas cosas que eran previsibles y cuando nosotros decíamos que había que intentar articular algo alrededor de una mayoría social más amplia... ahora vemos que es necesario. Estaría bien que ante la amenaza que tenemos, la propuesta, sin que nadie tenga que renunciar a sus propias agendas, ponga sobre la mesa alguna manera de articular una gran mayoría. Dejando claro que más allá de las diferencias que podamos tener entre independentistas y no independentistas, hay que tener claro que podemos trabajar juntos en el Parlamento, porque en la calle ya lo hemos visto. La gente, de manera plural, defendió las urnas.

¿Cómo se logra eso?

Es complicado. A nadie se le puede pedir que renuncie a sus objetivos. Si el Gobierno de la Generalitat quiere hacer una declaración de independencia, nosotros, por una cuestión de coherencia con lo que siempre hemos dicho, creemos que difícilmente podemos darle apoyo. Ese no-apoyo a un objetivo concreto no tendría que suponer una ruptura entre dos espacios que podrían trabajar juntos.

Por otro lado está sobre la mesa la posibilidad de un proceso constituyente, que es una idea amplia y podría ser una salida, aunque tampoco es fácil. Hay un debate sobre si es factible un proceso constituyente sin declarar antes la independencia. Hay voces que dicen que podría servir para continuar profundizando no tanto a nivel parlamentario, sino en la calle. Y esta es una crítica que se la ha hecho al Govern por nuestra parte, pero también por parte de la CUP. Todo el procés ha sido muy parlamentarista y el proceso constituyente añade eso y puede ser incluso desobediente, tal y como pone en nuestro programa electoral, que estos días estoy reivindicando. Pone que Catalunya necesita un proceso constituyente no sujeto a ningún otro marco. Dentro de nuestro espacio y nuestra coalición reivindico esa letra, a la que hay que dar profundidad. También habla de que tiene que ser coordinado, pero no subordinado.

¿Se entienden estos planteamientos en Podemos? Carolina Bescansa acaba de hacer una defensa de la españolidad de Podemos.

Estoy de acuerdo con que somos un partido estatal. Y tenemos un proyecto para el Estado. Pero ese proyecto es la plurinacionalidad, que quiere decir escuchar a todas las partes en pie de igualdad. Nuestro proyecto, y nuestra obligación, no es someternos al relato mediático del PSOE, del PP, de Ciudadanos y de toda su caverna mediática, sino que nuestro proyecto para España tendría que ser explicar a los españoles que lo que estamos defendiendo aquí no es contra España. Al contrario, es a favor. Si lo de aquí acaba con una imposición autoritaria del PP, que se vayan preparando. Sé que Bescansa lo decía en otro sentido, pero yo lo reconduciría de este modo. Tenemos que ser capaces de explicar esto desde Catalunya y creo que la dirección de Podemos a nivel estatal lo ha intentado. Fui a la reunión de Zaragoza a dar un mensaje de que quienes apalean a la gente aquí y no le dejan votar son los mismos que le joden la vida a la gente día sí y día también a los extremeños, a los murcianos y a los andaluces. ¿Les ha preguntado alguien si quieren rey o si quieren rescate a la banca?

¿Cómo están las relaciones en el grupo parlamentario de CSQP? ¿Se volverán a repetir las desavenencias de algún pleno anterior?

Es un grupo parlamentario muy plural. Es una riqueza, pero hay que saber manejarla. Somos tres fuerzas (Podem, EUiA e ICV). De esas tres, dos (Podem y EUiA) llamamos a la participación el 1-O. ICV se calló e incluso algunos de sus miembros llamaron al boicot. Esto, más que pluralidad es contradicción. Es verdad que hay puntos que nos unen, como que el referéndum debe ser una herramienta válida. La gravedad de lo que pasó el otro día no radica tanto en la pluralidad, sino en que se pueda expresar. Lo que pasó es que ICV, haciendo uso de la imposición, no dejó hablar a nadie más. Creo que todos tendremos que haber aprendido la lección. Entre otras cosas porque al final, si hay ánimo constructivo y no ánimo de apisonadora, no tienen por qué ser contradictorios.