Ion SALGADO
GASTEIZ

La casa consistorial de Asparrena ha reducido un 20% su consumo energético

El Ayuntamiento de Asparrena fue una de las diez instituciones elegidas para participar en el proyecto OrbEEt, una iniciativa financiada por la Comisión Europea dentro de la estrategia Horizon 2020 y diseñada para reducir el consumo de energía y la huella de carbono. Dos objetivos cumplidos, ya que la casa consistorial, el edificio elegido para llevar a cabo el citado proyecto, ha reducido su consumo energético anual cerca de un veinte por ciento.

La casa consistorial de Asparrena ha reducido en un 20% su consumo energético anual gracias al proyecto OrbEEt. «En otras palabras, las emisiones de carbono anuales generadas por las necesidades del Ayuntamiento se han reducido en algo más del 22%». Así lo indica la alcaldesa, Txelo Auzmendi, en una entrevista publicada en sortu.info, donde explica que el ahorro de energía ha sido consecuencia de «cambios de conducta muy sencillos», en alusión a la importancia de apagar la pantalla del ordenador cuando esta no cumple ninguna función o de tomar conciencia del calor perdido a través de las puertas abiertas.

Estos datos están recogidos en la evaluación del proyecto OrbEEt, en el que participan diez entidades públicas y privadas de la Unión Europea. «El proyecto se enmarca dentro de un programa europeo que busca la reducción del consumo de energía y la huella de carbono mediante el uso inteligente y sostenible de los recursos», señala la primera edil soberanista tras hacer hincapié en el papel que juegan las tecnologías de información y comunicación (TIC). «Se miden los datos de consumo de energía a tiempo real y se transforman en información personalizada que se da a los y las trabajadoras», añade, y detalla que estos datos se transmiten a través de una aplicación.

El proyecto ha constado de cuatro etapas. «En la primera de ellas se realizó un análisis detallado del edificio y de sus instalaciones. En una segunda etapa se estudiaron todos los procesos de servicios municipales que tienen lugar en el ayuntamiento. La tercera etapa fue posiblemente la más compleja desde el punto de vista técnico, ya que supuso la instalación y calibrado del sistema OrbEEt, consistente en una serie de sensores inalámbricos y aparatos electrónicos que registran las variables de consumo energético y confort de los usuarios de las oficinas, enviándolas al sistema. Y la última y más importante de las fases ha consistido en la evaluación del prototipo piloto OrbEEt, a través del empleo de diferentes herramientas creadas para fomentar cambios de conducta eficientes en las personas trabajadoras», apunta.

Otras iniciativas

Cabe señalar que este no es el primer proyecto que desarrolla el Ayuntamiento de Asparrena para reducir las emisiones y avanzar hacia la soberanía energética. En 2002 aprobó un plan para recuperar la central hidroeléctrica y en 2010 instaló un sistema de geotermia para calentar o refrigerar el polideportivo municipal. Además, en 2015 se puso en marcha el proyecto District Heating Biomasa, con el que se mantiene la calefacción del centro de salud, de la escuela y de la casa de cultura; y ha renovado el alumbrado público de Araia y del resto de concejos. Y desde el curso pasado contrata energía eléctrica de origen cien por cien renovable.

 

En busca de nuevas adhesiones en Errota

En las últimas semanas el Ayuntamiento de Gasteiz y el Gobierno autonómico a través de Visesa han redoblado sus esfuerzos para convencer de la bondades de la iniciativa SmartEnCity a vecinos y vecinas de Errota. A comienzos de setiembre se habían sumado 512 viviendas al proyecto, que tiene por objeto lograr la rehabilitación energética de esta zona, situada en el centro de la capital alavesa. Pero esta cifra dista mucho de los parámetros establecidos por las autoridades europeas, que exigen la participación de un mínimo de 750 pisos para dar el visto bueno a la financiación.

Las instituciones vascas cuentan con poco más de dos meses para lograr dicho objetivo –el plazo establecido finaliza el 31 de mayo– y han puesto en marcha nuevas medidas para facilitar la participación vecinal en el proyecto. Por ejemplo, han mejorado las condiciones de acceso al Fondo de Garantía, elevando el límite de ingresos por unidad familiar a 21.000 euros y rebajando el requisito de empadronamiento a un año. Y han organizado visitas guiadas a algunos edificios rehabilitados para que los interesados puedan conocer las ventajas del proyecto de primera mano.

En estas visitas también se muestra una red de calor de biomasa, similar a la que se podría instalar en el Centro Cívico Aldabe si sale adelante el proyecto, que se desarrollaría durante los próximo tres años.I.S.