GARA
BILBO

Y 38 semanas después… los lunes continúan siendo suyos

La burbuja de este refresco despierta aún un ligero picor en la garganta: el movimiento sigue vivo. Han transcurrido 38 lunes desde aquel 15 de enero y no han faltado a sus citas ni una sola semana. Surgió de forma espontánea y ha cimentado sus bases de forma transversal. Pensionistas de Euskal Herria vuelven a las calles este 1 de octubre, lunes y Día Internacional de las Personas Mayores. Ya avisaron de que no se marcharían a casa. Y son gente de palabra.

El Día Internacional de las Personas Mayores, que se conmemora ma&bs;ñana, resulta el marco perfecto de las manifestaciones que han convocado en diversas ciudades y pueblos las plataformas de pensionistas. El primer día del mes de octubre cae en lunes, lo que pone la guinda a las protestas semanales que vienen haciendo desde enero.

Bilbo está siendo la capital de referencia, incluso a nivel internacional, como lo han constatado los medios de comunicación; ha acaparado aperturas de informativos, grandes titulares y dejado impactantes imágenes. Es, probablemente, la ciudad donde los pensionistas han logrado mantener la llama más candente. Mañana no esperan menos, sino todo lo contario. Quieren «llenar las calles». Y auguran que así será. A las 11.30 partirán cuatro columnas desde Deustu, San Nicolás, Sagrado Corazón y Rekalde, para confluir a las 12.00 en la plaza Elíptica.

En Iruñea la cita es al mediodía en el Monumento a los Fueros. En Gipuzkoa, las concentraciones se llevarán a cabo de forma descentralizada frente a los ayuntamientos de cada municipio, incluida la capital. La manifestación de herrialde en Donostia se realizará el sábado, día 6, a las 17.30.

En Gasteiz, la manifestación de mañana partirá a las 19.00 desde Artium.

 

Pérdida de poder adquisitivo y problemas a fin de mes

«Nos han tomado el pelo. Con la entrada del euro nuestras vidas encarecieron un 66% mientras los sueldos han ido decayendo. ¡Así que no nos callaremos!». Una pensionista se expresaba así en declaraciones a GARA en una de las manifestaciones celebradas en Donostia. Resume a la perfección el sentir general de este colectivo, que cada vez tiene más cargas familiares y mayores dificultades para llegar a fin de mes. La subida del 0,25% son «migajas», advierten, lo mismo que los pagos atrasados ya tramitados por el Gobierno español. Reclaman que se haga en consonancia a la subida del IPC anual, que fue del 1,1% en noviembre pasado. Los pensionistas han ido perdiendo poder adquisitivo desde 2012.

 

Koloreak kolore, interes kolektiboa gailendu da

Urtarrilaren 15ean lehen elkarretaratzea egin zutenetik, nekaezin batu dira astero-astero Euskal Herriko pentsiodunak. Hainbat ordezkarik akaso espero zuten puxikak indarra galduko zuela, denbora kontua zela… eurek, ordea, argi esan zuten: «Ez gaituzte hemendik mugituko». Eta hala izan da. Urte sasoiek beren zailtasunak aurkeztu dituzte: negua euritsua oso, maiatza eta ekaina bezalaxe. Udak, berriz, oporraldiak ekarri ditu, tenperatura altuak; eta, aitzitik, deialdiek indar apur bat galdu badute ere, hutsik egin gabe elkartu dira gure nagusiak, eta zenbait kolektibori lezio bat eman diete. Eguraldiak eguraldi, eta bakoitzaren kolorea gorabehera, interes kolektiboa gailendu da.

 

Nos vemos el lunes a la misma hora en el mismo lugar

La famosa carta firmada por la entonces ministra de Trabajo Fátima Báñez, fechada el 4 de enero de este 2018, fue llegando a los buzones de los pensionistas del Estado español –unos 9 millones– en los días posteriores. La «tomadura de pelo» que se leía entre líneas despertó una mecha que ahora nadie puede sofocar. «El protagonista eres tú y los millones de personas que con su esfuerzo solidario y perseverancia habéis enfrentado con determinación las dificultades», comenzaba la misiva. Y tuteando. Ante lo que consideraron una provocación, germinó la primera convocatoria de reunión entre pensionistas. Lo curioso de la historia es que sucedió de forma espontánea, vía redes sociales y Whatsapp. Hoy es el día en que nadie es capaz de determinar la autoría de aquellos mensajes. El caso es que la primera cita se marcó para el 15 de enero… lunes. Se concentraron y debatieron, discutieron, reflexionaron… y se organizaron. Para evitar que aquel suflé perdiera fuerza, propusieron quedar a la misma hora en el mismo lugar el lunes siguiente. Y así lo han hecho hasta hoy.