Miembros de EH Bildu y de Eragin, la asamblea de jóvenes precarios de Bilbo, han explicado este miércoles en un acto conjunto sus posiciones sobre las consecuencias que trae el turismo y el modelo de ciudad que se está implantando en la capital vizcaina.

Jone Goirizelaia ha explicado que Bilbo ha sufrido un cambio muy importante en los últimos años. Según la candidata de EH Bildu, desde el Ayuntamiento se ha hecho una apuesta muy fuerte por convertir Bilbo en una ciudad de servicios, «dejando de lado la creación de empleo en otros sectores, y de otra manera manera que ayude a la estabilidad y a tener mejores condiciones laborales».

Desde EH Bildu creen que esta es una estrategia «errónea» desde el punto de vista económico y que no se ajusta a la ciudad. «Bilbo necesita tener una economía mucho más diversificada. Necesita muchos más puntos de inflexión económica y no es bueno poner toda la atención en una sola cosa, en este caso en el turismo», ha explicado Goirizelaia.

Asimismo ha asegurado que el turismo reporta beneficios «únicamente a unos pocos», y que los trabajadores y trabajadoras «que se levantan día a día en nuestra ciudad para atender a los turistas», tienen que hacer frente a unas condiciones «precarias», con unos sueldos «injustos» y con los derechos laborales «mermados, cuando no violentados». «No es oro todo lo que reluce y no todo los que tiene que ver con el turismo está bien», ha afirmado.

También ha informado que EH Bidu ha analizado esa situación que pretende «paliar». Por ello, esta mañana se han juntado con miembros de Eragin, y les han explicado su visión sobre como se dan «las consecuencias negativas en relación con las condiciones de vida de la juventud» y cuáles son sus propuestas.

Goirizelaia ha abogado por un plan para trabajar las políticas de turismo, donde además «se pongan límites y se traten las consecuencias negativas que la actividad turística genera en diferentes sectores».

Por otro lado, también han denunciado que este modelo de turismo lleva a un «importantísimo» incremento de los precios de alquiler. En este sentido, Goirizelaia ha subrayado que desde el comienzo de la proliferación de los pisos turísticos, el precio del alquiler ha aumentado en unas cifras «escandalosas», disparándose un 45% desde 2017.

Para controlar todas las cuestiones que tienen que ver con el incremento de los precios de los alquileres y los pisos turísticos, desde EH Bildu plantean la puesta en marcha de una inspección municipal que controle la oferta de pisos turísticos. Propuesta que aseguran que ya se ha puesto en marcha en otros lugares teniendo «muy buenos» resultados.

«Condena» a la juventud

Por su parte, Mikerl Ruiz, miembro de Eragin, ha remarcado la importancia que tiene el modelo de ciudad en la «precarización a la que se está condenando a la juventud». «La apuesta que está haciendo el Ayuntamiento por un modelo de sector terciario y sobre todo en la turistificación, está condenando a la mayoría de jóvenes de clase trabajadora a una precariedad que no podemos asumir como propia», ha asegurado.

En contraposición, ha denunciado que son unas pocas empresas las que están saliendo beneficiadas, dejando a los pequeños comercios de Bilbo y a los trabajadores «en situaciones cada vez más penosas». «Hemos pasado de llevarnos las manos a la cabeza con los trabajadores mileuristas, a soñar con trabajos de mil euros», ha lamentado.

Por último, ha subrayado que esto «no es un fenómeno meteorológico» y que tras estas situaciones existen responsables tanto empresariales como políticos y que «hay que empezar a depurar esas responsabilidades». «Frente a esta situación tenemos que decir alto y claro que no es lo que hay», ha concluido.