Este corto, ideal a la hora de desarrollar la inteligencia emocional de cualquier persona, tiene a un anciano y una niña como protagonista y relata la historia de amistad que nace entre ellos.

El corto narra una historia de amistad intergeneracional entre un anciano solitario que cuida de sus plantas con gran amor y tesón y una niña inquieta que siempre va acompañada de sus amigos revoltosos.

Es obra de Ludovic Gavillet, Derya Kocaurlu, Lucas Hudson y Colin Jean-Saunier y este trabajo audiovisual su proyecto de fin de carrera.