La Orquesta Sinfónica de Euskadi reestrena en Euskal Herria la obra ‘Zuhaitz’, de Gabriel Erkoreka, tres años después de que se estrenara en Madrid en marzo de 2016. Desde entonces no ha vuelto a ser interpretada, por lo que es casi un nuevo estreno, que vuelve a ser dirigida por el mismo maestro que lo hizo en aquella ocasión, Juanjo Mena.

Según ha explicado Oriol Roch, el director general de la OSE, pasados los conciertos de Madrid se prometió que traería la obra a Euskal Herria junto a Mena, y a pesar de que les haya costado hacer un hueco, ya es un hecho y durante la semana que viene ofrecerán conciertos en Gasteiz, Bilbo, Donostia e Iruñea.

Esa pieza es especial porque, según ha comentado el compositor, está hecha a medida para el trío vocal Kalakan «para que les quede como un guante». La Orquesta Nacional española le hizo el encargo de realizar una pieza en torno al folklore vasco, algo que hizo con gusto, y además tuvo la idea de integrar instrumentos tradicionales. «Yo tenía intención de hacer una obra para orquesta y txalaparta, pero los chicos de Kalakan me enseñaron todos los instrumentos que dominan», ha explicado. Así, cambió toda su idea y la adaptó a ellos, y por eso dice que «es una obra para Kalakan y orquesta».

Jamixel Bereau, uno de los componentes del trío, ha dicho que para ellos ha sido como «aprender un nuevo idioma, que es la música contemporánea. Esta experiencia tendrá su presencia en el Kalakan de mañana. Hemos aprendido algo nuevo y nuestras mentes se han abierto más. Ha sido una aventura muy bonita, tanto personalmente como musicalmente», ha asegurado. Sin embargo, al principio tenían sus reparos porque sentían este tipo de música «demasiado lejos» y de hecho al principio no entendían nada, pero poco a poco fueron «viendo las cosas».

‘Zuhaitz’ es uno de los platos fuertes del programa preparado para los conciertos junto a ‘Los planetas’ de Holst. De hecho, ‘Planetak/Planetas’ es el nombre que le han dado al conjunto. Como apertura, Mena ha elegido los ‘Himnos corales del Rig Veda’, también de Holst, por ser una obra no tan conocida.

El concierto se completa con la participación del coro de mujeres Vocalia, cuya representante, Arantxa Vega, ha dicho que todas están «muy contentas». De las 57 cantantes que participarán en los conciertos, cerca de 40 son viejas conocidas de Mena. Según han contado, cuando él tenía 16 años dirigió un coro de 100 niñas de entre 8 y 12 años, y muchas de ellas forman parte ahora de Vocalia. «Se presentan a muchos concursos internacionales y han arrasado. Desde mi punto de vista es un coro de nivel profesional», ha subrayado el director de orquesta. Para él, esta unión no convencional entre orquesta, coro y trío vocal es positiva porque de este modo «todos van a sentirse libres, todos tienen que ser flexibles para que funcione».