Marcel PENA

Torra, Puigdemont y Mas denuncian la represión en un acto conjunto en Perpinyà

Los tres últimos presidentes de la Generalitat de Catalunya –Quim Torra, Carles Puigdemont y Artur Mas– todos ellos represaliados por la Justicia, han denunciado su situación en un acto conjunto en Perpinyà. Al mismo tiempo, Felipe de Borbón presidía una entrega de premios en Barcelona acompañado de Pedro Sánchez entre las protestas independentistas.

Torra, Puigdemont y Mas en su comparecencia en Perpinyà. (Raymond ROIG/AFP)
Torra, Puigdemont y Mas en su comparecencia en Perpinyà. (Raymond ROIG/AFP)

Viernes políticamente muy movido en Catalunya. Mientras Quim Torra, Carles Puigdemont y Artur Mas, presidentes de la Generalitat de Catalunya, comparecían en Perpinyà, capital de Catalunya Nord, para denunciar la represión del Estado español, en Barcelona la visita de Felipe de Borbon y Pedro Sánchez provocaba las protestas del independentismo y un amplio despliegue policial.

La Casa de la Generalitat de Perpinyà ha acogido la comparecencia de los tres últimos últimos presidentes de la Generalitat, todos ellos represaliados por parte del Estado español en forma de inhabilitación en los casos de Torra y Mas y destitución en el caso de Puigdemont. Precisamente recordando esa «anomalía democrática» ha empezado su intervención Artur Mas, quien ha dicho que a pesar de que «los tres fuimos elegidos legal y democráticamente por el Parlament, hemos sufrido y sufriremos persecución judicial».

Aun así, Mas ha expresado que no han organizado el acto «para quejarnos ni exhibir nuestras heridas», las cuales ha explicado que llevan «con dignidad», sino para expresarse. En este sentido, Mas ha alertado a la Unión Europea que el proyecto de «la Europa de los Derechos Humanos, los valores democráticos y la libertad es incompatible con la España de la represión». «Estamos aquí para dejar claro que seguiremos defendiendo el derecho a la autodeterminación y la causa noble de la libertad», ha finalizado.

Por su parte, Puigdemont ha denunciado que al mismo tiempo de la comparecencia «el representante de la monarquía española, institución reinstaurada por Franco, está en la capital de Catalunya» y ha recordado que durante los seis años de reinado de Felipe de Borbón «todos los presidentes de la Generalitat han sido inhabilitados o destituidos». Además, ha puntualizado que también se deberían incluir los casos de Jordi Sànchez y Jordi Turull, «inhabilitados antes de llegar al cargo a pesar de cumplir con los requerimientos legales».

Sobre la coincidencia de horarios con la visita del jefe de Estado español, Puigdemont ha precisado que «la actividad ya estaba planificada cuando supimos que el Borbón iba a Barcelona».

En su turno de palabra, Torra ha comenzado reivindicando la Diada del País Valencià, como parte de «la idea de Països Catalans» y expresando su solidaridad con el pueblo madrileño. Precisamente, Torra también se ha referido a la gestión de la pandemia por parte de su gobierno, de la que ha dicho que han tenido que hacer frente «a una de las mayores catástrofes de los últimos años con las manos atadas». «Somos el ejemplo de que no puede haber un gobierno efectivo en una autonomía limitada», ha sentenciado.

Finalmente, los tres presidentes han presentado un manifiesto conjunto en el que reafirman su situación de represaliados políticos y piden diálogo y mediación internacional. El manifiesto está dirigido a la comunidad internacional, por lo que Mas ha sido el encargado de leerlo en inglés, Puigdemont en francés y Torra en catalán.

Puigdemont, de vuelta a Catalunya

Además del valor simbólico de que tres presidentes de la Generalitat hagan una rueda de prensa conjunta, el acto de Perpinyà también ha supuesto la vuelta de Puigdemont a tierras catalanas. «Mi presencia en Perpinyà va más allá de la política, porque es mi país. Es el lugar donde puedo reencontrarme con mi familia y ver el mismo pasaje que en Girona. Y como mi país, lo considero mi casa», ha explicado Puigdemont.

No ha sido la primera vez que Puigdemont volvía a Catalunya desde su exilio, ya que en febrero de este año ya participó en un acto celebrado en la capital norcatalana, y este verano también intervino en la Universitat Catalana d'Estiu en Prada de Conflent.

Protestas en Barcelona

Mientras transcurría el acto en Perpinyà, una concentración en Barcelona protestaba contra la presencia de Felipe de Borbón en la capital catalana. A primera hora de la mañana, el rey español ha presidido la entrega de premios del Barcelona New Economy Week en la estación de França. Fuera, centenares de personas han quemado fotografías del monarca ante un fuerte despliegue policial que impedía a los manifestantes acercarse al recinto.

En el acto, convocado por la ANC y Òmnium, Elisenda Paluzie ha denunciado este hecho y ha añadido que «intentan que cuando el rey viene a Catalunya ni siquiera vea las protestas». «Los Borbones reinan desde hace 300 años en Catalunya por derecho de conquista, y si había alguna duda, quedó disipado con el discurso del 3 de octubre», ha añadido.

Marcel Mauri, vicepresidente de Òmnium, también ha criticado la presencia de Felipe de Borbón en Barcelona. «Lo único que debería hacer el rey en Catalunya es pedir perdón por todo lo que ha provocado como principal responsable de la violencia y del 'A por ellos'».