La Real ha cumplido con todo merecimiento su objetivo de acceder a los dieciseisavos de final de la Europa League junto al Nápoles en un final vibrante para los blanquiazules. Estaban eliminados en el minuto 92, cuando ha marcado Willian José, y enseguida el Rijeka ha marcado el 2-1 contra un AZ que ha acabado el partido con diez, con lo que los napolitanos y los guipuzcoanos han firmado un pacto de no agresión en los últimos minutos porque el punto les valía a los dos.

Incluso con la derrota se habría clasificado la Real, pero el empate en el campo de un gran rival, al que ha sido superior en muchos momentos de los dos partidos, da el brillo que merece la fase de grupos que ha completado el equipo de Imanol. Ha superado en el juego a todos sus rivales en todos los partidos y solo la falta de acierto en el remate y los tres goles encajados en saques de esquina en los dos últimos partidos han complicado su continuidad hasta el final.

Imanol ha apostado en Nápoles por un equipo con más experiencia de lo habitual con Remiro; Zaldua (m. 46, Gorosabel), Zubeldia, Le Normand (m.78, Sagnan), Monreal (m. 78, Aihen); Guevara (m. 78, Isak), Zubimendi, Merino; Januzaj, Willian José y Portu (m. 55, Barrenetxea).

El oriotarra se ha decantado por jugar con tres pivotes para cubrir la baja de David Silva, con Guevara por la derecha más adelantado a la altura de Merino para presionar a los dos pivotes del Nápoles. Por primera vez en la Europa League Isak no ha sido el delantero centro titular. Willian José ha jugado todo el partido y ha respondido a esa confianza con su primer gol en Europa en el momento clave.

El Nápoles ha jugado con su mejor equipo formado por Ospina; Di Lorenzo, Maksimovic, Koulibaly, Mario Rui (m.82, Ghoulam); Fabián, Bakayoko (m.70, Demme); Lozano (m. 70, Politano), Zielinski (m. 74, Elmas), Insigne; Mertens (m.70, Petagna).

Un gran inicio

Los de Imanol han jugado una primera media hora muy buena con una gran presión que ha impedido salir de su campo al Napoles en los primeros veinte minutos. Portu ha tenido en el 18 una ocasión clarísima a puerta vacía a pase de Willian José para trasladar al marcador la superioridad en el juego, pero el murciano ha rematado fuera y ha dado vida al Nápoles.

Los italianos han creado peligro en su primer saque de esquina con un remate de Bakayoko fuera y se han adelantado en el segundo en el minuto 35 con un disparo de Zielinski desde la frontal ante el que Remiro no ha podido ni reaccionar.

Los guipuzcoanos han acusado el golpe de verse por detrás tras ser mejores hasta ese instante y han acabado mal el primer tiempo, pero se han repuesto en el inicio del segundo. Han comenzado con cuatro saques de esquina en los primeros cinco minutos, una buena opción de Merino, que ha rematado fuera, y otra de Willian José, que no pudo culminar un centro de Monreal.

A partir de ahí el Nápoles se ha replegado bien, ha controlado el partido e incluso ha tenido mejores opciones para sentenciar. Imanol ha agotado sus cambios para acabar con tres centrales, Merino, Januzaj y Barrenetxea por el centro, Gorosabel y Aihen como carrileros y Willian José e Isak como delanteros centros.

A la Real le ha costado crear ocasiones ante el buen entramado defensivo local, pero en el tiempo añadido ha llegado el gol de Willian José a la media vuelta de potente derechazo y el segundo tanto del Rijeka que los blanquiazules han celebrado como si fuera suyo. Ahí se ha acabado el partido porque los tres minutos siguientes el Nápoles ha tenido el balón y la Real ha dado por bueno el punto también sin buscar la victoria que le podía dar el primer puesto.

Todos los datos del encuentro se pueden consultar en la página especial de NAIZ.