El barco Ocean Viking, de la organización humanitaria francesa SOS Méditerranée, ha informado este jueves de que ha rescatado a 237 migrantes que se encontraban en dos botes a la deriva en el Mediterráneo Central. El barco espera ahora puerto en el que desembarcar.

El primer rescate lo han realizado a primera hora de la mañana, socorriendo había socorrido a 121 migrantes que se encontraban en un bote neumático a la deriva a 30 millas de las costas de Libia. Entre estos salvados hay 57 menores, de los que dos son niños pequeños. Un total de 55 menores no van acompañados por ningún progenitor ni tutor. Además hay tres mujeres embarazadas.

A pocas horas, el equipo de SOS Méditerranée ha salvado otros 116 migrantes de «un bote neumático lleno y en peligro». En este segundo rescate hay al menos 9 niños de edades iguales o inferiores a 12 años.

De forma paralela, Alarm Phone, una línea telefónica puesta en marcha por activistas que recibe las llamadas de los migrantes, advirtió de la existencia de otra barca con cerca de 90 personas que, según la ONG italiana Mediterranea Saving Humans, ya se encuentran en la isla de Lampedusa.

En estos momentos, el barco de la ONG española Open Arms también se está dirigiendo a la zona del Canal de Sicilia para su 80ª operación de vigilancia y rescate de migrantes.

780 migrantes muertos en el Mediterráneo en 2020

En 2020 se han podido contabilizar 780 muertes entre las personas que intentaron cruzar el Mediterráneo central, que sigue siendo la ruta migratoria más peligrosa del mundo, pero la OIM teme que, debido a la capacidad limitada para vigilar estas rutas, el número real de fallecidos en esta zona pueda ser mucho mayor.