Los sindicatos ELA, ALE y LAB han convocado una huelga por la tarde de este próximo jueves 18 en Kutxabank para reclamar a la empresa un convenio colectivo justo. Este paro parcial se suma a las concentraciones de los viernes ante las sedes del banco en Bilbo, Donostia y Gasteiz. A las centrales sindicales vascas se ha sumado en el Estado español Asprobank, sin representación en Euskal Herria.

El convenio colectivo del banco vasco firmado en 2015 caducó en 2019. Desde entonces, según los sindicatos, la dirección del banco ha apostado por una plataforma que «contiene únicamente recortes y degradación de las condiciones laborales de la plantilla, con congelaciones salariales e imposición de nuevos límites a los pagos por antigüedad».

Si la plantilla no se aviene a asumir esos recortes, la empresa, según las centrales, «forzará la aplicación del Convenio Estatal del Ahorro, un texto de mínimos con unas condiciones precarias, que allá donde se aplica ha necesitado ser dignificado a base de acuerdos en temas particulares entre plantilla y empresa».

«En definitiva, o se firman los recortes que la empresa impone por las buenas, o caemos a un convenio que impone unas condiciones de trabajo infinitamente peores a las actuales», han resumido.

«No es de recibo»

Para los sindicatos, «no es de recibo que una empresa que presume de ser la más solvente del sistema bancario estatal, y que declara unos beneficios de 160 millones de euros (con otros 277 destinados a provisiones) solo en los nueve primeros meses del 2020, sea capaz de operar únicamente en clave de recortes en las condiciones de trabajo y en la atención al público, con cada vez menos oficinas y empleados destinados a estas tareas».

Además, en un año tan duro como este, «con una pandemia que ha generado una tensión casi insoportable en plantilla y clientela, con oficinas cerradas por contagios, la empresa castiga de la manera más injusta la vinculación y el compromiso que la plantilla ha demostrado desde siempre con Kutxabank, y con lo que Kutxabank ha supuesto para la sociedad en general».

Por ello, exigen «una negociación real, como paso indispensable para acordar un convenio digno» que no suponga una merma de derechos laborales, e irán a la huelga el jueves por la tarde, cuando se concentrarán ante las sedes del banco en Bilbo, Donostia y Gasteiz.