El informe de coyuntura y salud de los bosques de 2020 presentado este miércoles por el presidente de GEBE, Juan Carlos Berraondo, señala que de las 37.436 hectáreas abandonadas que hay en la CAV en la actualidad, más de la mitad (19.470), se encuentran en Gipuzkoa.

Berraondo considera «preocupante» la evolución del bosque abandonado en este territorio, que en 1996 ocupaba 12.223 hectáreas y ha aumentado un 66% desde entonces. Según ha precisado, «el 92% es de propiedad privada».

Gipuzkoa cuenta con 121.600 hectáreas de superficie arbolada, pero «no es suficiente», y ha opinado que «el sector forestal necesita que las administraciones tomen conciencia y le arropen, empezando por los ayuntamientos».

El presidente de GEBE ha lamentado que las hectáreas de bosque quemadas recientemente en el incendio registrado en el valle del Bidasoa suponen un «duro golpe» para el sector forestal. Ha destacado que en Gipuzkoa «se han replantado con otras especies 2.600 hectáreas de antiguos pinares en los últimos años».

Banda marrón

Berraondo también se ha referido a la banda marrón del pino insignis, que ha ocasionado pérdidas para los propietarios «superiores a los 100 millones de euros». Según datos de Hazi, de las 30.100 hectáreas de este árbol que quedan en el territorio, «alrededor del 50% están severamente afectados por el hongo causante de la banda marrón, y el resto libres o con afección ligera».

En este contexto, ha aplaudido los «excelentes resultados en los ensayos realizados por Neiker del tratamiento con óxido cuproso», así como los «buenos resultados» de los experimentos con productos inocuos para la animales, en base a esencias naturales.

Ha alertado de que, actualmente, también los fresnos están siendo atacados por un hongo, denominado chalara, causante de la casi total desaparición de esta especie en el norte de Europa.

Cambio climático

Asimismo, ha destacado que «la masa arbolada de Gipuzkoa absorbe más de 900.000 toneladas de CO2 al año y se convierte en una herramienta indispensable en la lucha contra el cambio climático.

Las 121.600 hectáreas de bosque guipuzcoano absorben el equivalente al 14% de las emisiones totales del territorio, que ascienden a un total de 6,4 millones de toneladas de gases de efecto invernadero».

El presidente de GEBE ha opinado que «no se valora en suficiente medida la aportación del sector forestal y la selvicultura a la sociedad, tanto desde el punto de vista económico, social como ambiental», pese a que «aporta el 1,5% del Producto Interior Bruto (PIB) del territorio».