Antonio BROTO (EFE)
Ginebra

El clima y la pandemia golpearon por partida doble a unos 50 millones de personas en 2020

La pandemia de covid desvió la atención de años anteriores sobre el cambio climático, pero la ONU subraya que 2020 fue otro año de temperaturas récord y desastres meteorológicos que la desaceleración económica derivada de la crisis no frenó, por lo que reclama una reducción drástica de emisiones.

Rusia volvió a sufrir el pasado año temperaturas superiores a la media, registrando incendios forestales relacionados con el cambio climático. (Natalia KOLESNIKOVA | AFP)
Rusia volvió a sufrir el pasado año temperaturas superiores a la media, registrando incendios forestales relacionados con el cambio climático. (Natalia KOLESNIKOVA | AFP)

«Las emisiones globales deben reducirse de manera colectiva, a más tardar en 2030, en un 45% con respecto a los niveles de 2010». Esta es la petición lanzada este lunes por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, en la presentación del ‘Informe sobre el Estado Global del Clima 2020’.

El estudio, elaborado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en colaboración con otros organismos internacionales, muestra un 2020 en el que inundaciones, sequías y ciclones golpearon todos los continentes, mientras la ayuda humanitaria para atender a las personas afectadas por esas catástrofes se veía limitada por la pandemia de coronavirus.

Los desastres naturales y la pandemia afectaron por partida doble a unos 50 millones de personas, según cifras de la Cruz Roja incluidas en el informe, en un momento en el que las operaciones de evacuación, recuperación y socorro se vieron dificultadas por los confinamientos y otras restricciones.

Pese a ello, se estima que el número de personas que tuvieron que migrar a causa de los desastres meteorológicos no varió respecto a años anteriores, en los que se calcula que se han superado como media los 23 millones de desplazamientos anuales motivados por los fenómenos climáticos.

«Peligrosamente cerca del límite de 1,5 grados»

«El estudio demuestra que no hay tiempo que perder: el clima está cambiando y los impactos ya son demasiado perjudiciales para el planeta», ha advertido Guterres, quien ha indicado que los Estados deben comprometerse a lograr emisiones netas de valor cero antes de mediados de este siglo.

El secretario general de la ONU ha hecho estos llamamientos de cara a la cumbre de líderes sobre el clima, que se celebrará virtualmente esta semana bajo los auspicios de Estados Unidos, con miras a preparar planes más ambiciosos de reducción de emisiones antes de la COP26 que se celebrará en noviembre en Glasgow (Escocia).

Como ya habían advertido estudios preliminares en diciembre, el informe confirma que el pasado año fue uno de los tres más cálidos de los que se tiene registro, junto a 2016 y 2019.

La temperatura media mundial en 2020 fue aproximadamente 1,2 grados centígrados superior a los niveles preindustriales (1850-1900), y ello pese a que se produjo el fenómeno de La Niña, que suele contribuir a un enfriamiento global de las temperaturas.

«Estamos peligrosamente cerca del límite de 1,5 grados fijado por la comunidad científica» en los Acuerdos de París, ha señalado Guterres, quien ha calificado el informe de «aterrador», destacando que su contenido «debe ser leído por todos los líderes mundiales».

Los seis años pasados, entre 2015 y 2020, fueron los más calurosos de los que se tienen datos, y la desaceleración económica relacionada con la pandemia «no logró frenar los motores del cambio climático ni su cada vez mayor impacto», subraya la OMM.

Menos emisiones debido a la pandemia, pero...

Aunque la desaceleración económica derivada de la crisis sanitaria redujo temporalmente las nuevas emisiones de gases de efecto invernadero, esto no tuvo un impacto tangible en la concentración atmosférica de dióxido de carbono (CO2), uno de los principales causantes del calentamiento global.

La temperatura media mundial fue aproximadamente 1,2 grados centígrados superior a los niveles preindustriales (1850-1900)

Según la OMM, la concentración de CO2 en la atmósfera ya supera las 410 partes por millón, lo que supone un aumento del 148% respecto a los niveles preindustriales y una subida del 0,53% sobre las mediciones publicadas hace un año, que se teme seguirá creciendo hasta un 0,9% en 2021.

«La tendencia negativa en lo que respecta al clima continuará durante las próximas décadas, independientemente de los resultados favorables que obtengamos de las medidas de mitigación», ha vaticinado el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.

Hasta 54,4 grados en el Valle de la Muerte

El informe recuerda que muchas latitudes registraron el año pasado temperaturas récord, comenzando por los 54,4 grados marcados el 16 de agosto de 2020 en el Valle de la Muerte (California, EEUU), la cifra más alta de la que se tiene conocimiento en el mundo en los últimos 80 años.

El informe de la OMM confirma que 2020 fue uno de los tres más cálidos de los que se tiene registro: 54,4 grados en el Valle de la Muerte (EEUU) y 38 en el Ártico siberiano (Rusia).

También hubo récords estatales de temperatura en países como Cuba (39,7 grados) o Japón (41,1 grados), e incluso en el Ártico siberiano se alcanzó un máximo histórico de 38 grados.

El hielo marino en el Ártico se redujo a su segunda menor extensión histórica de la que se tiene registro y en Groenlandia se perdieron unos 152 millones de toneladas de hielo, una cifra que todavía fue mayor en la Antártida.

Año fatídico de huracanes y tifones

Si el Sahel y el Cuerno de África sufrieron graves inundaciones, el sur de este continente, así como Argentina, Brasil y Paraguay, se vieron afectados por sequías, mientras Siberia, Australia y Estados Unidos fueron azotados por grandes y prolongados incendios forestales.

Cifra récord con 98 tormentas tropicales, de las que 30, también un número sin precedentes, se produjeron en el Atlántico

El pasado año hubo, además, una cifra récord de 98 tormentas tropicales, de las que 30, también un número sin precedentes, se produjeron en el Atlántico, mientras en el Índico el ciclón Amphan produjo unas pérdidas económicas récord de 14.000 millones de dólares en India.

En el Pacífico, el tifón Goni llegó a las costas de Filipinas con vientos de 220 km/hora, una intensidad apenas vista hasta la fecha.