NAIZ

La vacunación ha podido evitar 150 muertes, 800 contagios y 400 hospitalizaciones en Nafarroa

Desde el comienzo de la vacunación se estima que las vacunas han prevenido en Nafarroa más de 800 infecciones sintomáticas, 400 ingresos hospitalarios y 150 defunciones por covid-19, según los datos del último informe epidemiológico.

Una sanitaria prepara una dosis de una vacuna contra el covid-19. (Gorka RUBIO/FOKU)
Una sanitaria prepara una dosis de una vacuna contra el covid-19. (Gorka RUBIO/FOKU)

Un total de 150 muertes, 800 contagios y 400 hospitalizaciones por covid-19 se han podido evitar en Nafarroa gracias a la vacunación, según el último informe epidemiológico, que apunta también que el impacto positivo de las inoculaciones se ha visto «parcialmente opacado por la expansión de la variante inglesa, que ocasiona mayor proporción de ingresos hospitalarios entre los afectados».

Añade que muchas de las hospitalizaciones y la mayoría de los ingresos en UCI se producen en grupos de población que no están vacunados, lo que está desplazando estos casos hacia edades más jóvenes y eso hace necesario mantener las medidas de prevención hasta que un porcentaje mayor de la población esté vacunada.

«Esto no significa que en ausencia de vacunación se hubieran producido necesariamente todos estos eventos, pero para evitarlos habría que haber seguido manteniendo medidas preventivas más estrictas que gracias a la vacunación se han podido suavizar, como, por ejemplo, en centros socio-sanitarios», puntualiza en relación a los datos facilitados.

El informe agrega que la vacunación muestra una alta efectividad y su impacto en la prevención de casos graves «es notable». Al respecto, puntualiza que en Nafarroa se observa una protección del 43% con una dosis de vacuna y del 82% con dos dosis para prevenir casos sintomáticos, mientras que la efectividad para prevenir los ingresos se sitúa en el 76% para las personas vacunadas con una dosis y en más del 96% para las vacunadas con dos dosis.

En todo caso, el informe aclara que «las personas vacunadas todavía pueden adquirir la infección y presentar formas graves», y pueden también «transmitir la infección», por lo que «deben seguir manteniendo las medidas preventivas, aunque el riesgo sea mucho menor» que entre los no vacunados.