El Eibar se marcha de Primera con muchas «primeras veces» por celebrar todavía pero en su despedida de la categoría intentará que haya una menos en la lista. Los azulgranas, descendidos matemáticamente desde la semana pasada, reciben este sábado (18.00, Movistar+LaLiga) a un Barcelona que también ha quedado apeado ya de la pelea por el título y al que nunca han podido ganar. Lograr la victoria sería una manera de endulzar el adiós, suficientemente amargo y más aún sin el consuelo de la afición en la grada, y lógicamente es el objetivo con el que parte el Eibar.

No podrá intentarlo con el once que ilusionó con el milagro gracias a los siete puntos sumados ante Alavés, Getafe y Betis, y tampoco con el que cayó la semana pasada en Mestalla porque Edu Expósito ha quedado fuera de la convocatoria. Sin explicación alguna aunque desde el servicio de prensa del club se ha aclarado que el centrocampista no está de baja médica ni sufre percance físico alguno. Lo más probable es que José Luis Mendilibar alinee un mix de esas dos formaciones, con el previsible regreso a la titularidad de Bryan y Enrich en detrimento de Kevin y Muto. Al centro de campo se reincorporará también Diop y seguirán Recio y Atienza, cuyo afianzamiento en el primer equipo es, probablemente, la mejor noticia de estas últimas semanas.

Sobre todo porque al centrocampista madrileño se le espera en Atxabalpe dentro de un par de meses cuando arranque la temporada, cosa que no puede decirse de muchos, si no la mayoría, de sus compañeros. Seis futbolistas regresan a sus equipos tras acabar cesión, el contrato de otros seis expira el 30 de junio y en el mejor de los casos renovará un par de ellos, e incluso entre los once futbolistas con contrato en vigor, al menos la mitad hará las maletas. Igual que el Director deportivo Fran Garagarza, el secretario técnico Mikel Martija y, salvo sorpresa, José Luis Mendilibar y su equipo de trabajo excepto Andoni Azkargorta, que renovó hasta 2023. En definitiva, que es una jornada de despedidas, bien sentidas en muchos casos.

El Eibar quiere ganar y, además, hacerlo con sus armas. «Podemos perder 5-0 –asume su entrenador– pero tenemos que ser de verdad nosotros. Nos jugamos querer ser nosotros mismos. El que salga, tiene que hacerlo con la mentalidad de querer ganar el partido y de ir a por ellos». No asegura nada, teniendo en cuenta que hablamos del colista, que apenas ha ganado seis partidos en toda la temporada pero la situación en la que llega el Barcelona permite ilusionarse con la posibilidad de un buen resultado. Salvando las distancias, también ha sido una mala temporada para los culés, que a estas alturas sólo aspiran a mantener el tercer puesto, y que además llegan sin Leo Messi, el futbolista que más goles le ha marcado al Eibar en este viaje por Primera.

El argentino, como Pedri, ha adelantado las vacaciones con permiso de su entrenador, igual que Ter Stegen no ha esperado para pasar por el quirófano y poder estar así en condiciones para cuando arranque la próxima temporada. Pese a todo, Mendilibar recuerda que se trata de «un grandísimo equipo. Y a nada que estén acertados o des tú la opción, te lo ponen difícil. Hay que ir a por ellos desde el principio porque si se ven cómodos, te van a machacar».