EH Bildu ha denunciado «con dureza» los hechos «intolerantes» acontecidos en la tarde del pasado sábado en Gasteiz, en los que fue agredido un exedil del PP en la calle Cuchillería, pero marca distancias también respecto al «uso político» que hacen «algunos» partidos.
En una rueda de prensa para hablar del Memorial dedicado a las víctimas de ETA y que este martes se inaugura en Gasteiz, Eba Blanco y Unai Urruzuno han subrayado que no se sumarán a textos cerrados que son «excluyentes» y están dirigidos al «desgaste político», en alusión a la declaración institucional de condena aprobada este lunes por todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Gasteiz, a excepción de EH Bildu.
Blanco ha dejado claro que el episodio sufrido por el exconcejal y vicesecretario de Comunicación del PP de Araba, Iñaki García Calvo, y tres de sus acompañantes es «diametralmente opuesto a la construcción de la convivencia democrática en Euskal Herria», al igual que lo son «los fastos de mañana con la inauguración del Memorial de las Víctimas».
Tras el hecho sobre el que se posiciona sin paliativos, EH Bildu llama la atención sobre la insistencia en «hacer seguir prevaleciendo el uso político de estas circunstancias para desgastar al adversario político, en lugar de conseguir denunciar de manera conjunta y unitaria los hechos ocurridos».
En el Ayuntamiento
En el texto suscrito en el Consistorio por PNV, PSE, PP y Elkarrekin, se muestra «repulsa y condena más enérgica» ante un hecho padecido por García Calvo «por su ideología política».
Según han denunciado, son unos hechos que «para nada representan a una ciudad cuyas señas de identidad son la convivencia, la tolerancia y el respeto a la pluralidad». El Ayuntamiento ha trasladado igualmente su cercanía y apoyo a los cuatro jóvenes agredidos y a todas sus compañeros de partido.
Tras no sumarse EH Bildu, el alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran, ha apuntado en dirección a la izquierda abertzale asegurando incluso que «hay mayores en ella que, lejos de acabar con estas prácticas, animan a los jóvenes a continuar con ellas».
«Sé que son pocos, pero sigue habiéndolos», sostiene Urtaran (PNV).