La contratación del entrenador, prioritaria para César Palacios

Durante su primera comparecencia en Ipurua, el nuevo director deportivo del Eibar ha adelantado que tiene «muy claro» quién es su elegido aunque no ha desvelado ni el «quién» ni el «cuándo».

César Palacios hablará esta semana con todos los jugadores con contrato. (SD Eibar)
César Palacios hablará esta semana con todos los jugadores con contrato. (SD Eibar)

Tras haber firmado el sábado un contrato por dos temporadas con opción a una tercera y después dos días «frenéticos», que ha dedicado a conocer instalaciones, grupos de trabajo «y sobre todo las personas, que es lo más importante», César Palacios ha protagonizado hoy su primera acto oficial como director deportivo del Eibar. El navarro ha comparecido junto a Amaia Gorostiza para explicar ante los medios los detalles de su llegada al club y sus planes para esta nueva etapa que afronta «contento, agradecido y orgulloso».

Palacios ha adelantado que su prioridad es la contratación del nuevo entrenador. «Es básico porque tiene que liderar el grupo, tiene que trabajar codo con codo y tiene que participar en la confección, se tiene que sentir partícipe en la planificación. Para mi es muy importante el trabajo en equipo, no sólo en el césped, en todas las áreas. Yo siempre he sido cercano, me gusta el día a día de los entrenamientos, convivir con el cuerpo técnico y los jugadores y creo que eso es especialmente importante en un club con la identidad como la del Eibar. Y también es clave que la relación con el entrenador sea de máxima confianza. Sabiendo cada uno su rol pero es importante ir todos de la mano y por eso es importante que el entrenador se sienta implicado también en la confección de la plantilla». A menos de mes y medio de que arranque la pretemporada y con una profunda renovación en la plantilla por hacer, es lógico, por tanto, que la llegada del técnico sea «prioritaria». No sólo eso, Palacios también ha asegurado que tiene «muy claro cuál es la persona que creemos que tiene que liderar este proyecto» pero no ha confirmado su nombre, ni cuándo puede llegar, entre otras cosas porque su fichaje no está atado. De hecho, ha reconocido que si no lo consigue habrá que «buscar alternativas». En cualquier caso ser un entrenador que «conozca y entienda este club».

Paralelamente a ese trabajo, Palacios tiene otra tarea que atender de forma inmediata. Esta primera semana la dedicará a «hablar con todos los jugadores que tienen contrato y con los que no tienen contrato pero nos interesa que sigan porque ese dado está dado ya por el club y estoy completamente de acuerdo. Estos días serán para hablar con todo ellos, sobre todo a nivel personal, las sensaciones… Pero el primer paso es el entrenador, que es básico –insiste–. Y a partir de ahí todo el tema de los jugadores».

Como sucede con el entrenador, también tiene claro el perfil de futbolista que quiere: con implicación y con hambre. Por eso prefiere futbolistas en propiedad «porque el sentimiento de implicación es más arraigado si el vínculo es más grande» aunque reconoce que «el mercado es lo que es y no se puede renunciar a nada. A lo mejor un cedido es el jugador clave para conseguir el objetivo. No voy a descartar cesiones, desde luego, porque lo que nos importa es hacer una gran plantilla». Tampoco mirará la fecha de nacimiento. Explica que, sobre todo por las limitaciones económicas, en el Numancia tuvo que apostar a menudo «por la gente joven. Y hay que darle un valor. Tenemos aquí a Atienza, que ha sido una gran alegría dentro del disgusto de bajar. Me gusta la gente joven pero lo que me importa es el hambre. Puede tener trentaytatos y tener hambre por competir y por formar parte de este club. Y es eso lo que necesitamos, saber lo que es la Segunda, sentirse identificado con lo que somos… La edad no es inconveniente».

En lo que respecta a sus funciones, Palacios ha explicado que llega solo, lo que invita a pensar, aunque no se ha hecho público como queda el organigrama deportivo, que se rodeará de gente de la casa. Ha subrayado, en este sentido, que «hay que darle mucho valor al trabajo que se ha hecho todos estos años. Tengo que amoldarme y aprovecharme de todo este buen hacer personal y profesional y confío plenamente en todas las personas que hay». «Creo que me tengo que adaptar, poner mi punto, mi personalidad, mi manera de ser y aprovechar los grandes profesionales que hay aquí –ha añadido–. Y luego veremos cómo podemos crecer».

Una nueva «familia», así espera que sea, a la que llega tras haber ocupado el mismo cargo en el Numancia durante una década y haber pasado este último año formándose, y a la que arriba «contento y agradecido por que hayan contado conmigo para liderar este nuevo proyecto. Estoy orgulloso». El agradecimiento también es para «Osasuna y Numancia porque me han hecho ser la persona que soy y los valores de esos clubes también son un reflejo de los que tiene el Eibar. Es muy importante sentir los valores del Eibar». Hasta ahora lo ha hecho desde fuera, viendo también «cómo ha crecido a todos los niveles. Es un lujo trabajar aquí y espero estar a la altura del trabajo que se ha hecho todos estos años. Me siento feliz de estar aquí, donde intentaré ser un buen profesional y una buena persona, como siempre he intentado».