Arnaitz Gorriti

Novak Djokovic se lleva el Roland Garros 2021 tras remontar dos sets en contra ante Tsitsipas

El serbio ha sumado su decimonoveno título de Grand Slam, uno menos que Nadal y Federer, después de cerder por 6-7 (6-8) y 2-6 las dos primeras mangas ante un Tsitsipas que no ha podido sujetar al balcánico que ha ganado los restantes tres sets por 6-3, 6-2 y 6-4.

Novak Djokovic besa la Copa de Mosqueteros, conquistado tras mucho sufrir en la final. (Anne-Christine POUJOULAT / AFP PHOTO)
Novak Djokovic besa la Copa de Mosqueteros, conquistado tras mucho sufrir en la final. (Anne-Christine POUJOULAT / AFP PHOTO)

Novak Djokovic lo ha tenido muy difícil ante el heleno Stefanos Tsitsipas, pero ha levantado una desventaja de dos sets en contra para adjudicarse el segundo Roland Garros de su carrera, su decimonoveno torneo del Grand Slam, siendo él el primer tenista en la «era Open» capaz de completar los cuatro grandes del Grand Slam en dos ocasiones.

El portento serbio ha tenido que levantar un 6-7 (6-8) y 2-6 adversos para llevarse los tres siguientes por 6-3, 6-2 y 6-4, en una final de resistencia pura, que ha durado cuatro horas y once minutos. En una Philippe Chatrier entregada con sus «escasos» 5.000 espectadores, la final masculina de Roland Garros ha vivido la quinta voltereta de toda su historia: primer fue Bjorn Borg sobre Manuel Orantes en 1974, después Ivan Lendl ante John McEnroe en 1984, Andre Agassi frente a Andrei Medvedev en 1999 y Gastón Gaudio ante Guillermo Coria en 2004, eran los cuatro únicos precedentes antes de la remontada que ha protagonizado «Nole» este domingo, superando a un Tsitsipas que se ha quejado de problemas lumbares, pero que ha caído más ante el genio de su rival que por sus problemas o errores cometidos. Tsitsipas no ha tenido ni una sola bola de break desde el segundo set.

Si el favorito absoluto era Djokovic, el serbio lo ha refrendado ganando en blanco sus tres primeros servicios, así como rompiéndole el saque al heleno con el 6-5. Pero Tsitsipas, superando una bola de set, ha conseguido romper el servicio de Djokovic y arrancar una victoria en el «tie break» por 6-8.

Ese éxito ha sido preludio de un set en el que Djokovic ha estado a merced del tenista griego, que le ha vuelto a romper dos veces más el servicio a su «vecino». Después de su dura semifinal ante Rafa Nadal, ha parecido verse a un Djokovic cansado y saturado, pero el paso por los vestuarios, cambiarse de ropa y enfriar un poco la final, le ha venido de perlas.

Solidez de granito

Han bajado un tanto las revoluciones en el juego de Tsitsipas, y no han vuelto hasta que ha sido demasiado tarde. Djokovic, en cambio, ha regresado hecho una bola de granito, que no ha cedido ni un solo punto de break más a su rival, mientras que al heleno le ha empezado a costar Dios y ayuda ganar cada servicio.

Y así, en el cuarto juego del tercer set, Djokovic ha roto el saque de Tsitsipas, preludio de ganar el tercer asalto por 6-3 y volver a romperle el saque al tenista griego, que previo a comenzar el cuarto set ha precisado la ayuda del fisio por problemas lumbares.

Haya sido por problemas de espalda o no, Tsitsipas ha estado lejos de su nivel en esa cuarta manga, al punto de que ha perdido dos veces su saque para caer por 6-2.

El duelo ha entrado, pues, en el set definitivo, y al tercer juego ha llegado el «break» de Djokovic, en un servicio de Tsitsipas en el que el heleno ha abusado de las dejadas, un recurso que ambos han usado más veces de lo normal debido a la presencia del viento, lanzando siempre estas jugadas con el viento de cara.

Con un saque roto a su favor, Djokovic ha mostrado una solidez aún mayor si cabe, aunque en honor a la verdad, hay que reconocer que Tsitsipas –que también en el Roland Garros de 2020 cedió ante Djokovic después de haberle ganado los dos primeros sets al serbio– no ha tirado la final, ni mucho menos.

De hecho, Novak Djokovic ha precisado de dos bolas de partido antes de sumar su Grand Slam número 19, uno menos de los que suman Rafael Nadal y Roger Federer. Tsitsipas ha vendido cara su derrota, y así lo ha reconocido el propio Djokovic, definiendo como «un gran campeón» al tenista heleno, que no ha podido hacer nada ante el remate en la red que ha supuesto el 6-4 definitivo del quinto set.

Tsitsipas ha roto a llorar después de ver confirmada su derrota, mientras que Djokovic ha podido al fin soltar toda la tensión almacenada, luego de sumar una de sus victorias más trabajadas y meritorias.