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El Gobierno etíope anuncia un alto el fuego hasta setiembre en Tigray

El Gobierno etíope ha anunciado un alto el fuego en Tigray unas horas después de que el Ejército y representantes del Gobierno federal abandonaran la capital de esta región, Mekelle.

Heridosn en el ataque a un mercado la semana pasada en Tigray esperan a ser atendidos en un hospital de Mekelle.(YasuyoshiI CHIBA/AFP)
Heridosn en el ataque a un mercado la semana pasada en Tigray esperan a ser atendidos en un hospital de Mekelle.(YasuyoshiI CHIBA/AFP)

El Gobierno de Etiopía ha anunciado este lunes que ha aceptado la solicitud de alto el fuego presentada por la administración regional de Tigray, que en principio durará hasta el final de la temporada agrícola, en setiembre, según la televisión estatal etíope.

En un comunicado, las autoridades centrales han explicado que han aceptado esta oferta de cese de las hostilidades de la administración interina que permitirá «a los agricultores labrar sus tierras, a los grupos de ayuda operar sin ningún tipo de movimiento militar en los alrededores y comprometerse con los remanentes del Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF) que buscan la paz».

El máximo responsable de la administración en funciones impuesta por el Gobierno etíope en la región de Tigray, Abrham Belay, había pedido un alto el fuego de cara a la próxima temporada agrícola, tras llevar a cabo consultas con representantes y funcionarios de la región.

Toma de la capital

El anuncio se produce horas después de que los representantes del Gobierno y los soldados del Ejército abandonaran Mekelle a toda prisa, según informes confirmados extraoficialmente en Twitter, lo que habría llevado al TPLF a tomar la ciudad, informa el “Addis Standard”. Según los testigos, las carreteras de acceso a la capital regional estarían llenas de residentes celebrando la vuelta a la ciudad del TPLF.

Tras la noticia del alto el fuego unilateral anunciado por el Gobierno etíope, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha informado de que ha hablado con el primer ministro del país africano, Abiy Ahmed, para trasladarle su «esperanza de que se produzca un cese efectivo de las hostilidades».
 
Siete meses de conflicto

El primer ministro etíope, Abiy Ahmed, anunció en noviembre de 2020 el inicio de una ofensiva militar contra el TPLF, en respuesta a un ataque del grupo contra la principal base del Ejército en Mekelle tras un drástico repunte de las tensiones entre la formación y el Gobierno central.

Las agencias de la ONU y las ONG han visto limitado su margen de maniobra en la zona, en un contexto marcado por una grave crisis humanitaria que azota Tigray.

Abiy Ahmed declaró la victoria sobre las fuerzas tigriñas a finales de noviembre después de que el Ejército federal tomara Mekelle, pero la guerra siguió activa pese a los llamamientos de la comunidad internacional a un cese de las hostilidades.

Desde el inicio del conflicto, miles de personas han muerto, cerca de dos millones se han visto desplazadas internamente en la región y al menos 75.000 etíopes han huido al vecino Sudán, país fronterizo con Tigray, según datos oficiales.

Se han documentado violaciones de derechos humanos en la región, incluyendo una estrategia organizada de violencia sexual y saqueo contra la población civil y las infraestructuras de la región, según testimonios médicos y organizaciones humanitarias.