Inglaterra y Ucrania regresan a casa. Pero el equipo de Andriy Shevchenko lo hace disgustado, tras caer eliminado en un pobrísimo partido, y el de Gareth Southgate para volver a pisar el césped de Wembley, donde el miércoles se enfrentará a Dinamarca por un puesto en la final.

Lo hará con la moral por las nubes tras convertir su duelo de cuartos en un paseo. Algo ha tenido que ver Ucrania, que ha confirmado que era el equipo más débil de esta ronda. Pero los británicos tampoco le han permitido ilusionarse con la posibilidad de dar otra campanada en un torneo en el que el campeón y el favorito ni siquiera habían llegado a esta ronda. Un tanto de Kane a las primeras de cambio y tres goles de cabeza –en la edición en la que más se han marcado así, 27– han reflejado la superioridad de Inglaterra, que llega a semifinales sin haber encajado un solo gol en los cinco partidos que ha disputado.

Kane ha encarrilado el partido cuando apenas se cumplía el minuto cuatro. Sterling le ha filtrado el balón tras una gran acción por la izquierda y el delantero del Tottenham ha resuelto para hacer el 0-1. Ucrania no ha parecido enterarse de que ese marcador le dejaba fuera de la Eurocopa porque salvo una llegada de Yaremchuk, en la que ha tenido más que ver un error de Walker que el propio futbolista del Gante, ni ha dado señales de vida ni, lo que es peor, se ha atrevido a intentarlo. Su fortuna ha sido que Inglaterra tampoco ha estado especialmente incisiva, aunque Buschan casi se queda sin mano despejando un chutazo de Rice, lo que le ha permitido llegar al descanso con desventaja pero viva.

Un espejismo que se ha desvanecido nada más comenzar el segundo tiempo. Al minuto de la reanudación, una falta sobre Kane ha permitido a Shaw colocar el balón en el área y a Maguire cabecear el 01. Y tres minutos más tarde, Shaw repetía asistencia, recibiendo un taonazo de Sterling para colocarlo en la cabeza de Kane, que tampoco ha perdonado. Al cuarto de hora, Kane ha rozado el hat-trick con un voleazo que Bushchan ha enviado a córner jugándose otra vez la mano. No le ha servido de nada porque ese saque de esquina ha acabado cabeceado a gol por Henderson, que apenas llevaba cuatro minutos sobre el césped.

Al partido le ha sobrado la media hora restante. Gareth Southgate ha agotado los cambios para mantener a sus titulares lo más frescos posibles y Ucrania sólo se ha acercado, sin claridad ni fortuna, en la recta final de un encuentro monocolor.