La contratación de Celia Pinedo, en noviembre de 2020, como responsable del programa Coworkids «fue ilegal», según la resolución del TAN. A principios de 2021 este programa sustiuyó a la intervención comunitaria que diversos colectivos llevaban años realizando en los barrios.

Los concejales de EH Bildu Joseba Asiron y Joxe Abaurrea han informado sobre la resolución en rueda de prensa, que añade que el acuerdo de la junta de Gobierno en el que se sustentó la contratación «es nula de pleno derecho».

«Enrique Maya y su equipo de gobierno crearon para Pinedo un puesto de libre designación que no se preveía en la Plantilla Orgánica del Ayuntamiento», señala la coalición. EH Bildu entiende que «el alcalde dio luz verde a un contrato a dedo sin base legal para alguien afín». Además, tal y como viene denunciado desde que se anunciase el programa, han subrayado que se puso en marcha «para acabar con los equipos preventivos de ocho barrios de la ciudad».

Ante esta resolución, EH Bildu pide que Navarra Suma «y no el Ayuntamiento» asuma el coste del contrato, cuyo sueldo anual asciende a 45.000 euros. Asimismo, han reclamado que se elimine el concepto de libre asignación para esa plaza y que «Maya y su equipo no aumenten la factura que para la ciudad va a tener este nuevo episodio de amiguismo presentando recurso ante el Contencioso administrativo».

La coalición entiende que «no es un debate de formas, sino de fondo» sobre los modelos de gestión. «La derecha, que va colocando a su gente con contratos de libre asignación, mientras se carga por la cara la labor de dos décadas de centenares de personas en los equipos preventivos de los barrios», ha apuntado Asiron.

«A la espera de ver qué consecuencias políticas tiene esta forma de gestión, lo que es evidente es que la ciudadanía no tiene que cargar con un coste que responde, única y exclusivamente, a una decisión de partido y que además se impuso al Ayuntamiento pese a las advertencias que lanzamos en su día», ha añadido Abaurrea.

El edil ha recordado que el contrato «se hizo en contra del criterio de los servicios técnicos del área de Infancia, sin que en su perfil profesional figurara experiencia previa en gestión de infancia, sin que contara con ningún tipo de arraigo en las estructuras de los barrios y cuyo currículum le situaba en el mundo de la cooperación en una fundación vinculada a las ideologías más conservadoras».

Por ello, ha acusado a Navarra Suma de tratar «a esta ciudad y su Ayuntamiento como si de su cortijo particular se tratara», recordando la subida de sueldo de Maya, las dietas de Comiruña, el episodio del concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu con la grúa, la contratación de una concejala de Na+ en Mendavia como pedadoga municipal (también recurrida ante el TAN) o más recientemente el concurso de hípica «apañado por una exconcejal y exparlamentaria de UPN». «Llueve sobre mojado», ha sentenciado.