«Frente a los hechos de violencia registrados en los últimos años hemos decidido declarar el estado de emergencia» en cuatro provincias de las regiones de Biobío y Araucanía, ha declarado el presidente chileno, Sebastián Piñera.

Esto «incluye el nombramiento de jefes de Defensa Nacional» que serán los encargados de restaurar el orden público que sufre «graves disturbios», ha añadido.

Con esta medida, los soldados, presentes en estas dos regiones, participarán en el mantenimiento del orden, brindando apoyo logístico a la policía y participando en patrullas.

«Son de dominio público los graves y reiterados actos de violencia vinculados al narcotráfico, al terrorismo y al crimen organizado, cometidos por grupos armados» en estas cuatro provincias donde murieron «inocentes» y policías, ha añadido Piñera.

Dos semanas

Por el momento, el estado de emergencia se ha declarado por dos semanas en las provincias de Biobio, Arauco (región del Biobio), Malleco y Cautín (región de la Araucanía).

La medida exige ser votada en el Parlamento si se extiende más allá de un mes. «De ninguna manera va dirigida contra un pueblo o un grupo de ciudadanos», ha asegurado el presidente.

Los mapuche, es decir, 1,7 millones de personas de los 19 millones de chilenos, principalmente presentes en el sur, llevan mucho tiempo reclamando la devolución de sus tierras en manos de terratenientes o silvicultores.

En un punto muerto, el conflicto ha provocado una escalada de violencia en los últimos años, con oleadas de ataques incendiarios contra propiedades privadas por parte de grupos militantes.

El domingo estallaron enfrentamientos en Santiago entre manifestantes y policías durante una «Marcha por la resistencia mapuche y la autonomía de los pueblos», en los que se produjeron un muerto y 17 heridos.

Riesgo de más violencia

«El Gobierno no ha podido implementar una política efectiva y justa» para solucionar el conflicto y la militarización podría provocar una escalada de violencia, ha advertido la politóloga Lucía Dammert, de la Universidad de Santiago.

El gobernador de la Araucanía, Luciano Rivas, miembro del partido gobernante, ha apoyado la medida por la «profunda crisis de seguridad» en la región y hab dicho esperar que «este estado de excepción sea utilizado como un apoyo a la labor de la Policía».

Las demandas de los mapuche, muchos de los cuales viven en la pobreza, comenzaron a emerger en el debate público al final de la dictadura (1973-1990). Ganaron fuerza en la ola de protesta social que sacudió a Chile a fines de 2019.

La Asamblea Constituyente, creada en junio, está presidida por una académica mapuche y 17 de sus 155 miembros son representantes de los diez pueblos indígenas de Chile.

Pero algunos líderes mapuche dudan de que la nueva constitución cumpla con sus demandas de restitución de tierras y autodeterminación.

Maniobra de un Piñera cuestionado y en una fecha simbólica

Algunos sectores políticos creen que Piñera puede tratar con esta medida de fuerza de obtener el respaldo de las fuerzas más derechistas del Parlamento, en el momento en el que se encuentra cuestionado por el escándalo de los papeles de Pandora y el juicio político que la oposición prepara en el Parlamento.

En las últimas semanas, en protesta por los actos violentos registrados en la zona, agrupaciones de camioneros han bloqueado diversas rutas en los sectores donde se aplicará el estado de emergencia, sin que en este caso hayan sufrido la violencia policial.

El anuncio, en un breve mensaje a la nación, coincide además con la fecha en que pueblos originarios de América Latina recuerdan su resistencia a la conquista y colonización española a la que los mapuche hicieron frente hasta el siglo XIX. Solo en 1870 fueron sometidos por el Ejército chileno, que comenzó a instalar colonos en sus tierras.

Biobio y Araucania son regiones fértiles de más de 55.000 km2 donde viven 2,7 millones de personas.