Aval a las medidas sanitarias adoptadas, aunque con ciertas dudas con la vacunación infantil son las principales conclusiones del sondeo realizado entre los días 15 y 19 de este mes en la CAV para determinar las percepciones y actitudes de la población sobre la pandemia de covid-19 y sus consecuencias.

Sobre la gestión sanitaria de la pandemia, la ciudadanía valora con 7,5 puntos sobre 10 la atención que Osakidetza está dando a las personas enfermas de coronavirus.

La actuación del Gobierno de Lakua en esta crisis obtiene una puntuación de 6,3 sobre 10 por parte de la ciudadanía; la actuación del Gobierno español 5,3 y la de la Unión Europea, 5,4 puntos.

Por otra parte, la población de la CAV otorga una puntuación de 8,6 a la actuación de las y los profesionales sanitarios, y de 7,6 a la de los científicos. Y otorga una valoración algo más baja a la actuación o comportamiento general de la propia ciudadanía durante la pandemia (6,1).

En este terreno sanitario, aparecen las dudas que genera la vacunación infantil, ya que el 48% señala que preferiría que se vacunara a su hijo o hija menor de 12 años, frente a un 23% que afirma que preferiría que no se hiciera, un 27% que no está seguro y un 2% que no sabe, no contesta.

Respaldo a las restricciones

Sobre su opinión en relación a las medidas restrictivas adoptadas para intentar atajar la expansión de la pandemia, se da un amplio respaldo. Así, un 65% de las personas encuestadas considera que las medidas adoptadas han sido adecuadas y un 10% afirma, incluso, que han sido excesivamente permisivas; solo un 20% asegura que han sido demasiado estrictas.

En este caso, la edad es determinante. Entre quienes tienen entre 18 y 29 años, un 34% cree que han sido demasiado estrictas, frente a solo un 7% entre las personas de más de 64 años.

Confianza en la recuperación económica

Sobre las expectativas de recuperación económica, un 45% de la población cree que la economía de la CAV se recuperará en 2023 o más tarde, y un 30% que se recuperará el próximo año 2022.

Un 50% de la población cree que el Plan Next Generation de la Unión Europea será muy o bastante efectivo para responder a los efectos de la pandemia en la economía, y un 33% que será poco o nada efectivo.

El estudio además analiza la percepción de la afección de la pandemia en la vida en sociedad. La sensación es de recuperación. Así, una de cada dos personas, un 48%, afirma que, comparando su vida actual con la que llevaba antes de la pandemia, sigue igual y un 8% adicional considera que su vida ha mejorado. Por el contrario, un 43% cree que su vida ha empeorado.

Los efectos más negativos se producen en la vida social y las relaciones (un 56% afirma que han empeorado) o el bienestar emocional y sicológico (39%). En menor medida en la situación económica personal (20%) o la salud (18%).

La mayoría de las personas encuestadas opina que todavía se tardará en vivir de manera similar a como se hacía antes de la pandemia. Un 39% cree que será en 2022 y un 32% en 2023 o más tarde. Un 4% afirma que ya estamos viviendo de manera similar a como lo hacíamos antes de la pandemia y otro 4% que lo haremos para fin de año. Por otra parte, un 12% de la población cree que nunca volveremos a vivir como antes.

Cambio de hábitos

Las opiniones están bastante divididas con respecto a cuánto cambiará la pandemia nuestros hábitos en diversos aspectos. Un 58% cree que cambiará mucho o bastante la manera de trabajar, un 56% la manera de relacionarnos con los demás, un 52% la conciliación de la vida familiar y laboral, otro 49% los viajes y, por último, un 36% cree que cambiará mucho o bastante nuestro respeto por el medio ambiente.

Preguntada sobre si, como consecuencia de la pandemia, estaremos más preparados para otras situaciones de emergencia en el futuro, un 19% cree que lo estaremos mucho más y un 47% bastante más. Un 22% considera que nuestra preparación aumentará poco y un 8% nada.

Por último, un 39% de la población apunta que, como consecuencia de la pandemia, aumentará mucho o bastante la colaboración internacional para hacer frente a problemas comunes; frente a un 51% que cree que aumentará poco o nada.