La Coordinadora de grupos de los barrios bilbaino de Bilbo Zaharra, San Francisco y Zabala ha denunciado a través de un documento la situación de «pobreza y exclusión social» que viven dichos barrios desde hace décadas.

El escrito, que cuenta con la adhesión de 35 colectivos vecinales y sociales, señala algunos datos de la realidad social de esta zona: menor esperanza de vida de la CAV, menor renta per cápita de Bilbao, mayor porcentaje de personas desempleadas, mayor número de personas que no reciben ningún tipo de prestación económica y en muchos casos ningún apoyo social, hacinamiento habitacional, infravivienda y ejecución de desahucios, personas sin hogar, abandono y desatención de muchas personas mayores, ausencia de alternativas para la infancia y juventud…

«Se trata de una realidad que podemos considerar endémica y que ha convertido a nuestros barrios en el espacio socio-urbanístico con la mayor concentración de problemáticas relacionadas con la pobreza, no sólo de la ciudad de Bilbao sino del conjunto de la CAV», explica.

La pandemia ha agravado la situación

Tal y como señala la coordinadora, la pandemia ha supuesto que afloren muchas de esas problemáticas «que, a menudo, son invisibilizadas social, institucional y mediáticamente» y «ha multiplicado sus efectos en cada vez más sectores del vecindario que han visto empeorada su situación económica y sus posibilidades de desarrollar una vida digna».

Asegura que a día de hoy hay un mayor número de personas, familias y grupos sociales empobrecidos y una gran parte del vecindario en una situación de precariedad «que hace que consideremos que nuestros barrios estén en una verdadera situación de emergencia social que, si no se atiende, puede aumentar y generar mayores problemáticas».

Abandono institucional

Asimismo, las asociaciones de estos barrios denuncian una situación de «abandono y desamparo» por parte de las instituciones, especialmente del Ayuntamiento de Bilbo, «que ni reconocen las problemáticas señaladas ni son capaces de intervenir de manera adecuada y decidida para su superación».

«En ese sentido, la situación de emergencia social no encuentra una respuesta adecuada por parte de las instituciones y los servicios públicos más sensibles al bienestar y a la cohesión social (servicios sociales, sanidad, educación, empleo, inclusión…), no cuentan con la capacidad, ni disponen de los recursos económicos y humanos, ni de las herramientas adecuadas para hacer frente a esta situación», explica.

Además, denuncian el tipo de actuación policial que se desplegó en estos barrios durante el confinamiento y posteriormente, «que ha puesto nuevamente sobre la mesa la criminalización de las personas pobres, migrantes y/o racializadas, y ha contribuido a la estigmatización de nuestros barrios».

Oportunidad perdida

La coordinadora de grupos ha criticado con dureza el Plan Zubirik 2021-2024 presentado por el Ayuntamiento para atender la necesidad de estos barrios y la ha catalogado como «una oportunidad perdida».

«Una vez más, nos encontramos con un puñado de actuaciones diversas, mayormente de poco calado y sin ninguna conexión entre sí, además de no abordar en profundidad cómo desarrollar unos servicios públicos con mayores recursos y mayor capacidad para ofrecer una atención universal y de calidad, especialmente en ámbitos como los servicios sociales, la sanidad o el empleo y la inclusión social. Y, por supuesto, no tienen en cuenta la situación de emergencia social que hemos descrito y que nos tememos que va a aumentar en los próximos meses», denuncia.

Ante ello, ha pedido al Consistorio bilbaino «voluntad política» y que ponga en marcha los recursos necesarios para revertir la situación de emergencia social que viven estos barrios y contribuya a construir para ellos y con ellos un futuro digno.