El Gobierno francés se reunirá el lunes 27 de diciembre para aprobar el proyecto de la futura ley contra la pandemia.

El Ejecutivo de Emmanuel Macron quiere que la reconversión del pase sanitario en pasaporte vacunal sea un visto y no visto.

Primero se conoció la intención de que el texto fuera adoptado en el Consejo de Ministros previsto para el 5 de enero.

Sin embargo, la progresión de los contagios a un ritmo nunca antes visto ha convencido al Ejecutivo de que se puede ir más rápido.

Finalmente, una reunión extraordinaria del Gobierno debería permitir a Macron contar con el texto el próximo lunes y registrarlo de inmediato para que la tramitación parlamentaria pueda estar finiquitada, salvo imprevistos, para la primera quincena de enero.

Consulta previa al Consejo de Estado

Por seguir ahorrando tiempo, el Gobierno galo ya ha enviado un borrador de la nueva norma al Consejo de Estado, a fin de que ese órgano no se demore en emitir su parecer respecto a un instrumento con el que Emmanuel Macron puede volver a traspasar algunas líneas rojas.

Así se desprende de la información publicada este 22 de diciembre por Marc Rees (@reesmarc) redactor en jefe de ‘Next Impact’ y especialista en derecho numérico, que ha colgado en la red un borrador en el que se apuntan las correcciones y novedades que el ejecutivo quiere incorporar a la legislación en vigor.

De acuerdo a ese texto el pase vacunal regiría para todos los mayores de 12 años y sería solicitado para entrar en locales de hostelería, ferias, seminarios, salones profesionales, o transportes interregionales así como en la práctica totalidad de las actividades de ocio.

Ya no bastaría, por lo tanto, con un PCR negativo. Sin pauta completa de vacunación, no se podría acceder a numerosos establecimientos.

Tener el pase vacunal actualizado será el paso previo. Desde el 15 de diciembre ello pasa para los mayores de 65 años por tener la tercera dosis puesta. En el caso de las personas de más de 18 años tienen hasta el 15 de enero para solicitar esa dosis de refuerzo.

De acuerdo al borrador en cuestión, con la nueva ley en la mano se mantendría como salvedad el acceso a servicios esenciales, con mención expresa a los centros de salud.

Eso implica que se podrá seguir accediendo sin restricciones a urgencias y que la solicitud del pase sanitario regirá como hasta ahora para las personas acompañantes.

Documentos acreditativos de la identidad

Uno de los elementos novedosos que incluye el texto, caso de confirmarse la redacción con la que figura en la versión descargable en la citada web, es la posibilidad de que «en caso de duda, se solicite junto al pase vacunal un documento de identidad».

Hasta la fecha solo los agentes de Policía tienen potestad para solicitar un documento oficial caso de tener dudas sobre la identidad de la persona que presenta el pase sanitario.

Salvo que el Consejo de Estado aconseje lo contrario, según el proyecto de ley se extendería esa capacidad de pedir un documento oficial de identificación por ejemplo al guardia de seguridad de un salón profesional, a la controladora de un tren o al dueño de un restaurant.

La cuestión de la gestión de datos es una de las cuestiones en las que se tiene la web que ha filtrado el documento de trabajo del gobierno sobre la reforma de la ley anti pandemia.

La reforma de la ley contempla, por lo demás, mayores controles y obligaciones para los establecimientos y retoca algunos capítulos de la versión precedente para garantizar la posibilidad de imponer y hacer respetar periodos de aislamiento o cuarentena.

Reglamenta con especial detalle la aplicación de confinamientos sanitarios en las prisiones.

En el borrador se preconiza la prórroga del estado de urgencia sanitaria en territorios coloniales como Martinica o Reunion hasta el 31 de marzo de 2022.