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Llueve sobre mojado: 2.386 dependientes vascos murieron en 2021 sin respuesta a su solicitud

El drama del tiempo de espera para atención a personas dependientes se evidenció en el año del estallido de la pandemia, pero no ha mejorado gran cosa en 2021: 2.386 que habían solicitado ayuda fallecieron sin respuesta de enero a diciembre, lo que supone más de seis al día.

Demanda de atención a la dependencia en una movilización de pensionistas en Bilbo.
Demanda de atención a la dependencia en una movilización de pensionistas en Bilbo. (Marisol Ramírez | Foku)

Un total de 2.386 personas fallecieron en 2021 sin ver atendidas parcial o totalmente sus peticiones de dependencia en Hego Euskal Herria. Un drama que se repite y que no ha mejorado gran cosa respecto a los pésimos datos de 2020, el año del brutal estallido de la pandemia, cuando fueron 2.720 los muertos en estas circunstancias.

Estos datos se recogen en el XXII Dictamen del Observatorio de la Dependencia, en el que se constata que se arrastra aún la paralización de las valoraciones de dependencia que se produjo durante los momentos más duros de la pandemia.

En concreto, recoge que en 2020 fueron 2.492 los fallecidos en estas circunstancias en la CAV y 228 en Nafarroa, mientras que en 2021 ambas cifras han descendido de modo escaso: 2.235 y 151 respectivamente. Ello supone que cada día mueren 6,5 personas dependientes en Hego Euskal Herria sin recibir respuesta a su petición de ayuda.

De hecho, como principal conclusión el estudio recoge que en 2021 el sistema de dependencia «quedó nuevamente paralizado» en la CAV, «en valores muy similares al dramático ejercicio 2020», lo que implica que el pasado año «no se recuperó el nivel de atención existente en 2019».

Más malos detalles en la CAV

El informe revela que entre enero y diciembre de 2021 fallecieron 13.297 personas con solicitud de dependencia en el conjunto de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, un 13,3 % más de los esperados. Una vez excluidas las 1.281 que no acreditaban dependencia, la cifra se quedó en 12.016 muertes, entre ciudadanos con derecho y pendientes de resolución de grado.

De estas, el 81,4% estaban siendo atendidas, pero el 18,6% formaban parte de la lista de espera. En concreto, 374 estaban a la espera de la resolución de grado y 1.861 tenía ya el derecho reconocido, pero no la resolución de prestación.

El informe señala que la CAV es la única autonomía que ha reducido el número de personas atendidas

El informe analiza el impacto del Plan de Choque para la Mejora del Sistema de Dependencia en la CAV, a la que le correspondieron 4,2 millones de este programa. Señala que ha sido la única autonomía que ha reducido el número de personas atendidas, al pasar de 65.757 en 2020 a 65.741 en 2021, lo que supone una reducción del 0,02% frente al aumento medio estatal del 8,71%.

El resto de parámetros básicos, como las solicitudes de dependencia (107.110, un 1,14% más que en 2020), las valoraciones (106.624 y un 1,14% más) y las personas con derecho a prestación (78.831, es decir +0,61%), se encuentran por debajo de la media estatal.

La CAV cerró 2021 con un ligero aumento de prestaciones como teleasistencia (+1.183), centro de día (+397) y atención residencial (+620), aunque la mayoría no consigue reponer los niveles previos a la pandemia: ayuda a domicilio (-726), centro de día (-307), atención residencial (-224) y ayudas a familiares cuidadores (-1.276).

El informe asegura que en el caso de la reducción de las ayudas a los familiares para cuidar de los dependientes en el hogar no tiene incidencia el covid y que, por tanto, es reflejo de la «verdadera involución del sistema», ya que es la prestación que han utilizado muchas autonomías en los momentos con más contagios.

Por su parte, los costes directos por la gestión de prestaciones y servicios durante 2021 se estiman en 612 millones de euros. Las instituciones de la CAV aportan el 67% de este gasto (57,2% en la media estatal), el 16,5% llega de la Administración General del Estado (21,5% en la media estatal) y el 16,5% de lo usuarios mediante copago (21,3% en la media estatal).

El promedio de gasto público en la CAV por persona dependiente es de 6.861 euros, un 13,8% más que la media estatal como consecuencia de un mayor porcentaje de atención residencial y del mayor coste de las prestaciones a familiares cuidadores.

El sistema generó 479 nuevos empleos con la financiación adicional del Plan de Choque, aunque en este campo tampoco se han recuperado los niveles previos a la pandemia.