Elkarrizketa
Bill Ramsay
SNP Trade Union Group

«Los resultados de estas elecciones serán el disparo de salida a la campaña del referéndum»

Bill Ramsay es el coordinador del SNP Trade Union Group, sindicato afiliado al Partido Nacionalista Escocés (SNP). Como previa a las elecciones locales que se celebran este jueves en Escocia, NAIZ ha podido hablar con él sobre estos comicios o un posible nuevo referéndum en 2023.

Bill Ramsay, coordinador del SNP Trade Union Group.
Bill Ramsay, coordinador del SNP Trade Union Group. (Aritz LOIOLA | FOKU)

¿Cómo afronta el SNP las elecciones locales escocesas de este jueves?

Las encuestas prevén que el SNP conseguirá el mayor número de representantes en todo el país y será el partido ganador en la mayoría de pueblos, por lo que podrá gobernar en solitario o tejiendo alianzas con otras formaciones. Bajo mi punto de vista, los resultados de estas elecciones serán el disparo de salida a la campaña del referéndum de independencia que queremos celebrar en 2023. Que el SNP gobernara en la mayoría de ayuntamientos significaría que sigue siendo el partido dominante.

¿Qué es lo que sabemos del posible referéndum de 2023?

La primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, con el apoyo de Los Verdes, que cuenta con dos ministros, han mostrado su intención de celebrar un nuevo referéndum de independencia a lo largo de 2023, aunque por el momento no sabemos ni la fecha exacta ni la pregunta que aparecerá en las papeletas. Por el momento, en caso de que se confirme su celebración en 2023, se baraja como probable organizarlo después de verano, entre septiembre y octubre, algo similar a la cita de 2014.

Algunos de los partidarios a seguir unidos con Inglaterra opinan que la invasión de Ucrania complica su celebración, aunque el movimiento independentista no lo ve así. El Gobierno escocés asumió que no hubiera sido apropiado celebrar el referéndum durante la crisis de la covid-19, pero ahora mismo no se plantea que deba ser aplazado más allá de 2023.

En 2014, el «no» a la independencia fue mayoría. ¿Podría ser distinto esta vez?

El voto independentista en 2014 fue del 45%, lo que transformó el panorama de la política escocesa. La gente olvida que cuando comenzó la campaña dos años antes, allá por 2012, el apoyo a la independencia rondaba el 25%. En el momento del referéndum, había crecido 20 puntos y desde entonces la base independentista no ha decrecido, sino que las encuestas recogen nuevos apoyos. Por tanto, asumimos que una vez dé inicio la campaña electoral y la gente se centre en ello, el apoyo al «sí» a la independencia todavía puede aumentar más.

¿Afecta de alguna manera que el país, igual que el resto de Europa, esté inmerso en una crisis económica y energética importante?

En estos momentos, debido a la situación económica, el aumento de los costes está asolando Europa y el Gobierno británico no ha sabido responder. Por tanto, la campaña por la independencia deberá basarse en buscar soluciones y proponer políticas que den salida los problemas de la gente, como el aumento de los precios y el encarecimiento de la energía. Será una decisión entre independencia o continuar en ese contexto.

En el referéndum de 2014 ya pudo verse esa tendencia. Aunque ganó el «no» con un 55% de los votos, en las ciudades con predominio de la clase trabajadora hubo un apoyo mayoritario a la independencia.

Al norte de Escocia se encuentra el campo petrolífero de Cambo. ¿Cuál es la postura de su sindicato ante una posible explotación, teniendo en cuenta la actual crisis energética?

Escocia ha apostado decididamente por las energías renovables, y está previsto que su importancia vaya en aumento, por lo que en este sentido el petróleo será cada vez menos importante. Además, el Gobierno escocés es también profundamente antinuclear y ya hay un programa destinado a alejarnos de las formas tradicionales de producir energía y que apuesta por energías renovables y sostenibles.

En cambio, esas fuentes energéticas, como en el caso de los pozos de petróleo, están bajo control del Gobierno de Westminster y, en mi opinión, veo probable que con la excusa del aumento de precios debido a la guerra de Ucrania puedan optar por revertir los plazos adoptados en el Acuerdo de Glasgow. Creo que el Gobierno británico dará luz verde a incrementar su producción en un futuro.