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Confirman la muerte de Protais Mpiranya, uno de los más buscados por el genocidio ruandés

Como comandante de la Guardia Presidencial, Mpiranya fue acusado por el TPIR en 2000 de ocho cargos de genocidio, complicidad en genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.

Mpiranya fue acusado de genocidio, complicidad en genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.
Mpiranya fue acusado de genocidio, complicidad en genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra. (AFP)

Protais Mpiranya, uno de los fugitivos más buscados aún por el genocidio ruandés de 1994, ha muerto en Zimbabwe y el caso en su contra se ha cerrado, según ha informado este jueves la Fiscalía de la corte que sucedió al Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR).

Según ha avanzado ‘The Guardian’, el cuerpo de Protais Mpiranya yacía enterrado bajo una losa de piedra con un nombre falso en un cementerio de Harare, en Zimbabwe, que los investigadores de la ONU rastrearon e identificaron con la ayuda de una pista encontrada en una computadora confiscada: el diseño hecho a mano para la lápida de Mpiranya.

Su cuerpo fue exhumado el mes pasado a pedido de los investigadores de la ONU, y la identidad de Mpiranya fue confirmada por un análisis de ADN el martes.

En un comunicado, la Oficina del Fiscal del Mecanismo Residual Internacional de los Tribunales Penales (IRMCT, en sus siglas en inglés) ha indicado desde su filial en Arusha (Tanzania) que «confirma hoy la muerte de Protais Mpiranya».

Mpiranya era el «último de los principales fugitivos acusados» por el TPIR y presunto líder del genocidio de 1994 contra los tutsis en Ruanda. «Ahora sólo hay cinco fugitivos pendientes bajo la jurisdicción del IRMCT», ha señalado la Fiscalía.

El IRMCT fue creado por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU de 2010 para finalizar el trabajo del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) y del Tribunal Penal para Ruanda, tras la finalización de sus respectivos mandatos.

«Para las víctimas de sus crímenes, Mpiranya era un fugitivo temido y notorio, líder de la Guardia Presidencial durante el genocidio y más tarde alto comandante de las FDLR (Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda, milicia compuesta por hutus implicados en el genocidio)», afirmó el fiscal jefe del IRMT, Serge Brammertz.

«Confirmar su muerte proporciona el consuelo de saber que no puede causar más daño», ha subrayado Brammertz, al indicar que la Fiscalía presentará «una moción a los jueces del IRMCT a su debido tiempo para cerrar oficialmente el caso contra Mpiranya».

Como comandante de la Guardia Presidencial, Mpiranya fue acusado por el TPIR en 2000 de ocho cargos de genocidio, complicidad en genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.

En particular, se le imputó la responsabilidad por los asesinatos, entre otros, de la primera ministra ruandesa Agathe Uwilingiyimana y de diez cascos azules belgas de las Naciones Unidas durante la matanza que asoló el pequeño país africano en 1994.

El genocidio empezó el 7 de abril de 1994 tras el asesinato el día anterior de los presidentes de Ruanda, Juvénal Habyarimana (hutu), y Burundi, Cyprien Ntaryamira (hutu), cuando el avión en el que viajaban fue derribado sobre Kigali.

La matanza que siguió -el Gobierno ruandés acusó a los rebeldes tutsis del Frente Patriótico Ruandés (RPF, en inglés) del asesinato- causó la muerte de unos 800.000 tutsis y hutus moderados en poco más de tres meses.