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Unzué, 20 minutos en el balcón exprimiendo el momento

Lo habitual es que el lanzador del txupinazo se retire tras cumplir su misión, pero Juan Carlos Unzué ha exprimido el momento: 20 minutos ha pasado en el balcón «disfrutando al máximo» y satisfecho por los agradecimientos trasladados y la visibilidad dada a la ELA.

Juan Carlos Unzué, al prender la mecha festiva.
Juan Carlos Unzué, al prender la mecha festiva. (Eduardo Sanz | Europa Press)

El exfutbolista Juan Carlos Unzué ha lanzado con «emoción» el txupinazo sanferminero, un emotivo momento que ha dedicado a los sanitarios y ha compartido con los enfermos de la dolencia que él mismo padece, la ELA, y que le ha hecho sentirse «muy bien, en el que he tratado de disfrutarlo al máximo».

Tras lanzar el cohete, Unzué ha permanecido durante más de 20 minutos en el balcón de la Casa consistorial, disfrutando del momento y de la fiesta que se estaba montando en la plaza, cuando habitualmente el lanzador del txupinazo abandona un minuto después el lugar.

«Es que esto no se va a volver a repetir y había que aprovechar, ver un poco el ambiente y sentir esa emoción», ha dicho en declaraciones a los periodistas que aguardaban a conocer sus sensaciones.

«Es una experiencia que no has vivido nunca. Ver este ambiente desde la calle o desde los videos impone, pero verlo desde aquí arriba, mirar a la cara de muchos de los que están abajo y ver la ilusión, las ganas de disfrutar de nuevo de sanfermines es inolvidable», ha señalado.

En cuanto a su emotiva dedicatoria del txupinazo a los sanitarios y a los enfermos de ELA, ha reconocido que «tenía claro lo que quería decir, porque les hemos hecho saber lo que les queríamos durante la pandemia, pero no nos podemos olvidar. Los sanitarios son las personas que realmente nos dan la posibilidad de vivir, de vivir en mejores condiciones, de cuidarnos, de hacer muchas cosas que a nuestra gente más querida le costaría. Y creo que hay que agradecer».

En todo caso, «la satisfacción, el orgullo que yo he sentido hoy, es difícil que lo vuelva a sentir», ha reconocido un Unzué que también ha subrayado que su intención era «representar a todas y todos mis compañeros de enfermedad. Espero que se hayan sentido bien representados y que con este honor hemos tenido la posibilidad de visibilizar un poquito más esta causa tan complicada».

Así, ha señalado que las personas afectadas por enfermedades como esta «necesitamos tener unos objetivos, ser un poco ambiciosos para encontrar una motivación cada día que nos levantamos, para seguir adelante».

Lo material y lo intangible

«Es verdad que muchas veces cerramos esos objetivos siempre con una idea muy material en muchos casos. Y ahora mis objetivos de vida ya no están relacionados con conseguir algo material, sino que lo que estoy recibiendo es afecto, cariño, respeto... Y eso son emociones y sentimientos» inolvidables para él.

La de hoy ha sido una de las intervenciones más comprometidas del guardameta de Orkoien, de 54 años, quien jugó un total de 318 partidos en Primera División en Osasuna, Barcelona, Sevilla, Tenerife y Oviedo y visitó como futbolista los estadios de los grandes equipos europeos.

Retirado año atrás de los campos como futbolista profesional, en junio de 2020, Unzué conmocionó el mundo del fútbol al anunciar que padecía esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad progresiva para la que aún no existe cura.

Desde entonces, el exfutbolista ha mantenido una apretada agenda de conferencias, reuniones y charlas informales con jugadores de fútbol, estudiantes y todo tipo de colectivos sociales para transmitirles sus reflexiones e inquietudes, pero siempre desde un punto de vista desenfadado y optimista.