El Gobierno francés ha decidido reforzar las ayudas para la compra de bicicletas eléctricas a nivel estatal, un medio de transporte «más limpio y económico», en especial para las personas con discapacidad y bajos ingresos.

El boletín oficial francés recoge este sábado la medida por la que la subvención general por la compra de una bicicleta eléctrica pasa de 200 a 300 euros, esta vez sin necesidad de haber recibido previamente una ayuda local, ya que a esta escala también suele haber contribuciones públicas.

Esta ayuda estará reservada a las personas que ingresan menos de 13.489 euros al año.

Para las personas con discapacidades y cuyas ganancias anuales no superan los 6.300 euros la ayuda será de 400 euros.

Las subvenciones serán mayores para las bicicletas de carga, plegables o con remolque, cuando la ayuda pasará a 2.000 euros, y 1.000 para las personas sin discapacidad.

Para bicicletas mecánicas, la ayuda corresponderá al 40 % del precio hasta un máximo de 150 euros.

Además, para las personas con discapacidad que quieran deshacerse de un coche contaminante para comprar un bicicleta eléctrica, la ayuda será de 3.000 euros, y de 1.500 para personas con bajos ingresos.

Estas ayudas completan las subvenciones regionales y locales que ofrecen ya algunas ciudades francesas, como París y su región, con hasta 500 euros para bicicletas eléctricas.