La vicepresidenta del Gobierno español y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha visitado este jueves junto con el consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo, la estación gasista de Euskadour en Irun, una  infraestructura «clave» para enviar gas natural hacia el Estado francés. También han estado, entre otros, el alcalde de Irun, José Antonio Santano, y el delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso.

«La estación está ya técnicamente preparada para enviar ese gas cuando los franceses lo soliciten», ha explicado Ribera a los medios de comunicación tras la visita a las instalaciones del gasoducto, que une la planta de regasificación Bahía de Bizkaia Gas (BBG) de Bilbo y el almacenamiento de la plataforma Gaviota, en Bermeo, con el almacenamiento subterráneo de Lussagnet, en Landas.

La nueva configuración de la estación, con la puesta en marcha de un nuevo compresor, estará en pleno funcionamiento el 1 de noviembre, ya que, aunque técnicamente ya está preparada para ello, es necesario realizar ajustes y llevar a cabo la comercialización por parte de los operadores.

Según los datos técnicos facilitados por el Ministerio de Transición Ecológica, la capacidad de la estación pasará de 2.000 millones de metros cúbicos (2 BCM) al año a 3,5 millones. Existe otra conexión existente hacia el norte situada en Larrau (Nafarroa), con una capacidad de 5 BCM al año.

Europa «no puede depender de Rusia», ha señalado Ribera, quien ha manifestado que la soberanía energética pasa por el despliegue de las renovables, la eficiencia y el almacenamiento, pero también requiere fortalecer las infraestructuras eléctricas y gasistas, para lo cual es necesario reforzar las inteconexiones «pensando en clave de futuro con el impulso del hidrógeno».