Tras su desigual debut liguero, Athletic y Alavés cogen el autobús para disputar mañana la tercera jornada de Liga ante rivales complicados en ambos casos. Las rojiblancas visitan al Levante defendiendo liderato, aunque los resultados del sábado ya le han descabalgado del primer puesto, y las gasteiztarras al Atlético de Madrid en busca de los primeros puntos de la temporada.
Habrá reencuentro en el choque entre Athletic y Levante (19.00, DAZN), donde Erika Vázquez ejerce de segunda entrenadora. El equipo granota también sumó los tres puntos en su primer partido de la temporada pero no pudo decidir hasta el descuento su victoria frente al debutante Alhama.
Bastante más claro fue el triunfo del Athletic ante el Sporting de Huelva. Iraia Iturregi reconoce que el liderato, con ocho equipos empatados a puntos, es «algo anecdótico» pero también admite la importancia de «empezar ganando» y con buenas sensaciones. Sobre todo porque está convencida de que su equipo «va a ir a más» aunque el calendario en el primer tramo de la competición es realmente complicado. Lo será, sin duda, el partido de mañana, que la entrenadora prevé «muy atractivo», ante un rival que «va al ataque» y tiene delanteras muy peligrosas.
Iturregi mantiene las bajas de Garazi, Naroa y Monente pero recupera a Naia Landaluze y Yulema y mantiene en la convocatoria a Sara Ortega y, primera goleadora del curso, Jone Amezaga.
En el Alavés es Sanadri la que vuelve a la convocatoria, ya recuperada, pero a cambio Mikel Crespo pierde a Alba Aznar por lesión. Tras caer en su debut ante el Madrid, las albiazules buscan sus primeros puntos de la temporada frente a un Atlético de Madrid (12.00, DAZN) renovado y muy potente, que la semana pasada ganó al Sevilla en su estreno.
Reconoce el técnico alavesista que se trata de un equipo que «nos va a exigir muchísima concentración porque tienen mucha velocidad arriba». Destaca la importancia de «saber sufrir» ante un rival que querrá someter a las albiazules y frente al que su equipo tendrá que estar «atento con balón y tratar de llevarlo rápido a las zonas que queremos» para evitar el peligroso contragolpe colchonero.
