Pello Guerra

Pensionistas de Euskal Herria piden que se ponga fin al «maltrato» de la banca

Mediante diversas movilizaciones, pensionistas de Euskal Herria han protestado contra el «maltrato» de la banca a la ciudadanía en general y a las personas mayores en particular, ya que se siguen cerrando sucursales, desaparece la atención personalizada y se impone internet en las gestiones.

Imagen de la manifestación de pensionistas que ha denunciado en Iruñea «las malas prácticas bancarias».
Imagen de la manifestación de pensionistas que ha denunciado en Iruñea «las malas prácticas bancarias». (NAIZ)

A través de diferentes movilizaciones, pensionistas de Euskal Herria han denunciado el «maltrato» de la banca a la ciudadanía en general y a las personas mayores en particular, al ir desapareciendo la atención personalizada e imponer el uso de internet en las gestiones a pesar de la brecha digital.

En Iruñea, el Movimiento de Pensionistas ha realizado una manifestación que ha partido de la plaza del Ayuntamiento para terminar en la sede de la Federación Navarra de Municipios y Concejos, donde se ha hecho entrega de un informe que recoge los resultados de las mociones presentadas en diferentes ayuntamientos de Nafarroa sobre las malas prácticas bancarias.

Durante el recorrido, realizado en tres filas y presidido por una pancarta en la que se podía leer «Stop abusos banca!! Banka publikoa orain!!», se han coreado consignas como «No a la tiranía financiera», «No a los abusos de los bancos», «Servicios bancarios no privados» o «Banketxeak lapurrak».

Esos lemas han acompañado todo el recorrido hasta la FNMC, donde se ha hecho entrega de un informe que reclama «la eliminación de las malas prácticas de las entidades financieras que afectan gravemente a la atención que, como servicio público que son, deben prestar a la ciudadanía en general y a las personas mayores y pensionistas en particular», según ha señalado Benito Uterga, portavoz del Movimiento de Pensionistas de Iruñea.

Uterga ha recordado que «la inmensa mayoría de las personas que tienen de 70 años para arriba tienen dos problemas fundamentales, porque, por la pensión, muchos ni siquiera tienen acceso a internet y en segundo lugar, el conocimiento de la utilización para operar es mínimo».

El portavoz del Movimiento de Pensionistas de Iruñea ha reconocido que «desde que iniciamos nuestras denuncias, se han corregido algunos problemas. Hemos visto mejoras en algunos aspectos, pero otros siguen igual». Y en este sentido, ha puesto el acento en que «no se ha repuesto el servicio a zonas rurales y barrios periféricos de las ciudades, el cobro de comisiones, el cierre de cajeros automáticos o deficiente servicio en los mismos, incluso algún cierre de oficinas y la resistencia a suscribir cuentas de pago básicas y a veces hasta inadmitiendo que se soliciten».

Por todo ello, «pedimos que en todas las poblaciones, las entidades financieras tengan una atención presencial, por lo menos para las personas mayores y para quienes no tienen acceso a internet».

Así se recoge en las mociones aprobadas por 42 consistorios del herrialde y que se han hecho llegar a la FNMC, a la que se pide «una reunión para definir cómo se puede articular la materialización de esas peticiones, que se pongan en práctica».

Uterga ha considerado fundamental el apoyo de las instituciones navarras para poner fin a «las malas prácticas bancarias, ya que trabajan con bancos y entidades financieras y tienen la capacidad de exigir lo que planteamos. Lo que no puede ser es que cada vez más poblaciones se queden sin medios personalizados de atención y que haya que desplazarse a otros lugares para tenerla. Exigimos que esa atención personalizada llegue a todos los sitios de Navarra y sin límites de horarios. Porque la banca tiene que atender las necesidades de los clientes y no que los clientes tengan que adaptarse a lo que quiera la banca».

Además, «seguiremos insistiendo en la necesidad de desarrollar una banca pública como herramienta de socialización del crédito y el ahorro como referente del sistema financiero de Navarra».

Movilización en Bilbo

En el caso de Bilbo, la marcha, con las mismas reivindicaciones, ha arrancado desde el Ayuntamiento y ha llegado hasta la Plaza Circular, donde los pensionistas han recorrido y entregado una carta y un informe a los bancos situados entre esas dos ubicaciones.

Los pensionistas se han concentrado a las doce en punto del mediodía ante el Consistorio bilbaino y han iniciado una manifestación que se ha detenido en primer lugar ante la sede de la Asociación de Municipios Vascos, Eudel, y posteriormente ha recorrido todas las entidades bancarias ubicadas entre plaza Elíptica y la plaza Circular de Bilbao.

Los manifestantes han entregado una carta y un informe tanto a los bancos como a Eudel, donde han mostrado su «malestar» por la situación en la que todavía se encuentra la ciudadanía en general y personas mayores en particular.

En este sentido, la representante del Movimiento de Pensionistas de Bizkaia, Andrea Uña, ha denunciado que existen municipios que han perdido sucursales y cajeros, y las personas mayores «tienen muchísima dificultad para sacar dinero» o acudir allí, en la medida en que «no atienden en ventanilla, sino que todo es digital».

Por ello, ha afirmado que en el caso de las personas mayores principalmente, «el trato en la banca sigue siendo muy discriminatorio».