El agente de la Ertzaintza detenido el pasado jueves con 55 kilos de cocaína en su casa ha ingresado en un módulo especial de policías en la cárcel de Logroño. Tras pasar a disposición judicial el pasado viernes, el juez decretó su ingreso provisional en prisión.

El agente, un patrullero de 49 años miembro de la 14ª promoción de la Ertzaintza que estaba destinado en la Ertzain-Etxea de Bilbo, estaría involucrado en una red dirigida por un traficante de Cantabria, pero en los últimos tiempos se habría desligado de la misma para actuar por su cuenta y pasó a trasladar grandes cantidades de droga desde Madrid a la capital vizcaína y desde allí la distribuía por Euskal Herria, La Rioja, Cantabria e incluso Aragón.

Fue detenido en Galdakao junto a su socio, encarcelado en Basauri.

Durante los registros realizados por la Ertzaintza en este operativo, se ocuparon 55 lilos de cocaína, con un valor en el mercado de unos 10 millones de euros, según detalló el consejero de Seguridad de Lakua, Josu Erkoreka, y 20.000 euros en metálico.

De acuerdo a las investigaciones, este agente el año pasado pudo haber obtenido unos ingresos por valor de unos 300.000 euros que blanqueó con la compra de billetes de lotería premiados.

Según precisó Erkoreka el pasado viernes, este agente había «depurado bastante» su forma de actuar, ya que tenía una furgoneta en la que podía llegar a ocultar hasta 40 kilos de droga y para su transporte adoptaba «importantes medidas de seguridad» dado que, por ejemplo, los desplazamientos los hacía habitualmente detrás de un coche lanzadera que le abría camino y exploraba el terreno.