Hunkituta ageri da Lula bere jarraitzaileean aurrean Sao Paulo.
Hunkituta ageri da Lula bere jarraitzaileean aurrean Sao Paulo. (Carl de Souza | AFP)
Malkoei ezin eutsi Bolsonaren aldekoek.
Malkoei ezin eutsi Bolsonaren aldekoek. (Andre Borges | AFP)
Algara handia sortu du ezkerreko hautagaiaren garaipenak Sao Paulon.
Algara handia sortu du ezkerreko hautagaiaren garaipenak Sao Paulon. (Carl de Souza | AFP)
Emakume talde bat, Lularen garaipenarekin pozaren pozez.
Emakume talde bat, Lularen garaipenarekin pozaren pozez. (Carl de Souza | AFP)
Bolsonaro ez da gauean agertu ere egin, baina Lularen jarratzaileek ez dute faltan bota.
Bolsonaro ez da gauean agertu ere egin, baina Lularen jarratzaileek ez dute faltan bota. (Carl de Souza | AFP)
Espetxealdiak ez du Lularen ospea apaldu, kontrakoa baizik.
Espetxealdiak ez du Lularen ospea apaldu, kontrakoa baizik. (Carl de Souza | AFP)
Presidente berria, bere emaztearekin.
Presidente berria, bere emaztearekin. (Carl de Souza | AFP)
Gosearen aurkako borroka nabarmendu du Lulak, kargua hartu zuen lehenengo aldian bezala.
Gosearen aurkako borroka nabarmendu du Lulak, kargua hartu zuen lehenengo aldian bezala. (Carl de Souza | AFP)
NAIZ

Lula vuelve a presidir Brasil tras ganar por la mínima a Bolsonaro

Luiz Inácio Lula da Silva ha ganado este domingo la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil con un 50,9 % de los votos, frente al 49,1 % que obtuvo el actual gobernante, el ultraderechista Jair Bolsonaro.

Lula se dirige a sus seguidores y seguidoras en Sao Paulo tras conocerse el resultado electoral.
Lula se dirige a sus seguidores y seguidoras en Sao Paulo tras conocerse el resultado electoral. (CARL DE SOUZA | AFP)

El exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva ha ganado este domingo la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil con un 50,84 % de los votos, frente al 49,16 % que obtuvo el actual gobernante, el ultraderechista Jair Bolsonaro, con el 100% de las urnas escrutadas.

El líder del Partido de los Trabajadores (PT), que ya gobernó entre 2003 y 2010, volverá a ocupar la Presidencia de Brasil a partir del 1 de enero de 2023.

Lula ha obtenido ha recibido 60,3 millones de sufragios, mientras que Bolsonaro, líder de la extrema derecha brasileña y capitán retirado del Ejército, ha sumado 58,2 millones, según los datos del Tribunal Superior Electoral (TSE).

Durante la campaña, Lula, de 77 años, prometió «reconstruir» Brasil, acabar con el hambre, que hoy afecta a unos 33 millones de brasileños, y «colocar al pobre en los presupuestos» del Estado, combinando responsabilidad social, fiscal y ambiental.

También anticipó que estaría en el poder durante un solo mandato, que en Brasil es de cuatro años.

La victoria de Lula era algo impensable hace unos años por los procesos judiciales a los que tuvo que hacer frente. Pero en 2021 la Corte Suprema anuló las condenas que le hicieron pasar 580 días en prisión, recuperando así sus derechos políticos.

«Democracia y libertad»

Conocida su victoria, Lula se ha dirigido a sus seguidores y seguidoras en las calles de Sao Paulo y ha subrayado que este resultado «no es una victoria mía o del PT (Partido de los Trabajadores). Es una victoria de todas las mujeres y los hombres que aman la democracia, que quieren libertad, que quieren cultura, educación, fraternidad e igualdad».

Ha asegurado que Brasil ha derrotado en las urnas «al fascismo y al autoritarismo», y que el reto ahora es definir «cómo será arreglado este país. Todavía no sabemos si el actual presidente va a facilitar la transición». Bolsonaro sigue sin reconocer su derrota horas después de terminar el recuento.

«Fui elegido para gobernar para 215 millones de brasileños y voy a gobernar para todos» pero «serán los más necesitados los que van a estar en el centro de las políticas del Gobierno», ha declarado Lula, quien asumirá el poder el próximo 1 de enero.

Polémica actuación policial

Cabe señalar que el escrutinio ha puesto el punto final a una jornada marcada por la actuación de la Policía Federal de Tráfico de Brasil (PRF, por sus siglas en portugués), que ha realizado al menos 514 intervenciones de fiscalización de vehículos que realizaban transporte público para electores en zonas consideradas favorables a Lula da Silva.

La PRF incumplió así una orden expresa del Tribunal Superior Electoral (TSE), que había prohibido cualquier operación relacionada con el transporte público de electores para no entorpecer la votación.

Los observadores electorales nacionales e internacionales han llegado a manifestar una «gran preocupación» por las denuncias sobre la intervención de la PRF.

Un responsable del Centro Carter ha advertido de que son «prácticas que suponen un cambio en las reglas y operaciones en medio de un proceso de votación». «Están totalmente fuera de los estándares internacionales de transparencia electoral», ha indicado, citado por 'Folha'.

La coordinadora general de Transparencia Electoral Brasil ha manifestado por su parte su preocupación por las informaciones difundidas y ha indicado que está revisando cuidadosamente lo ocurrido.