Stop Desahucios y la plataforma de Inquilinos Azora, junto con los vecinos de los inmuebles situados en las calles Bermingham 1, Zabaleta 55 y Segundo Izpizua 2 de la capital donostiarra, han impulsado esta moción en la que se pide la mediación del Consistorio para que este «fondo buitre» renueve los contratos en condiciones similares a las actuales con el incremento del IPC.
Solicitan que el equipo de gobierno realice la misma labor con otras viviendas que Azora tiene en la Avenida de Ategorrieta y en la calle de La Salud.
Asimismo piden que se realicen las gestiones necesarias con la propiedad para «interrumpir el proceso de vaciamiento de estos inmuebles residenciales» y para que las viviendas vacías «puedan ser destinadas al fin para el que han sido edificadas, es decir, satisfacer la necesidad de vivienda, cumpliendo con su fin social».
El cuarto punto de la moción pide al Ayuntamiento que promueva «cuantas reuniones» sean necesarias con las administraciones públicas para incidir en la «urgente necesidad» que tiene la capital guipuzcoana de medidas legislativas destinadas a la limitación del precio del alquiler.
Pisos de lujo
No ha salido adelante el quinto y último punto, en el que se instaba al gobierno municipal a poner en marcha un grupo de trabajo para determinar, por zonas, los índices de referencia del precio de la vivienda en alquiler. PNV, PSE y PP han votado en contra.
Stop Desahucios ha advertido de que Azora pretende «vaciar» los pisos de sus inquilinos actuales para acometer reformas en los inmuebles con el objetivo de crear viviendas de lujo, lo que supondrá «la expulsión de sus hogares de al menos 30 familias durante los próximos 12 meses».
Inmobiliaria Vascongada, anterior propietaria de las viviendas, prometió a estos inquilinos la renovación de los contratos de las viviendas, que en su día fueron alquiladas vacías y en mal estado por lo que los vecinos tuvieron que realizar inversiones que ahora no las pueden recuperar.