Una marcha denuncia en las calles de Bilbo el racismo institucional que «vulnera la vida»

Centenares de personas se han manifestado este martes a la tarde en las calles de Bilbo para denunciar el racismo institucional que «vulnera la vida». Han exigido políticas públicas «que vayan direccionadas a una verdadera igualdad racial y social», que condenen el racismo en todas sus expresiones.

Centenares de personas se han manifestado en Bilbo contra el racismo.
Centenares de personas se han manifestado en Bilbo contra el racismo. (Monika Del Valle | FOKU)

Centenares de personas han participado este martes a la tarde en la manifestación convocada en Bilbo por quince organizaciones con motivo del Día Internacional contra el Racismo y la Xenofobia. Tras una pancarta con el lema «Contra las políticas racistas» y al ritmo de percusión africana, han marchado desde la plaza Corazón de María, en el barrio de San Francisco, hasta el Ayuntamiento.

Los manifestantes han denunciado que «el sistema racista, capitalista y patriarcal se sostiene en base a leyes y políticas que perpetúan el odio, la vulnerabilidad y la desigualdad social en nuestras vidas».

Las quince organizaciones convocantes han unido sus voces para alertar de que lo que se llama racismo institucional «no es otra cosa que el racismo manifestado dentro de las políticas públicas, las políticas racistas, que justifican la violencia dentro y fuera de las fronteras».

Son esas políticas, han subrayado, las que dan cobertura a la «militarización» y los «desalojos ilegales» en barrios pluriculturales como el de San Francisco. Son esas políticas, han añadido, las que justifican «las paradas por perfil étnico a la juventud migrada» o «la violencia y los asesinatos en las fronteras».

También son esas políticas, han remarcado, las que «condenan a trabajar sin derechos en la manta o en condiciones de explotación a las mujeres racializadas en el ámbito de los cuidados». «Es el trato diferenciado que se ejerce sistemáticamente sobre las personas racializadas, gitanas y migradas», han denunciado.

Los convocantes han querido dejar claro que «son las políticas públicas, existentes e inexistentes, las que sostienen este sistema que deteriora y vulnera la vida de las personas racializadas, migradas y gitanas». Han puesto como ejemplo la Ley de Extranjería, «que deja sin derechos fundamentales a miles de personas; en la dificultad en el acceso a los procesos de regularización, en las trabas que existen para acceder a viviendas dignas y al padrón».

«Faltan políticas públicas»

En Euskal Herria, al igual que en el Estado español, han advertido, «faltan políticas públicas que vayan direccionadas a una verdadera igualdad racial y social, políticas que condenen el racismo en todas sus formas».

Han lamentado que la educación antirracista no esté implementándose en todos los centros. «Creemos que es imprescindible que la Administración integre la perspectiva antirracista dentro de la agenda de diversidad para garantizar espacios libres de violencias y la formación antirracista a toda la comunidad educativa, garantizando una educación basada en el respeto a la diversidad, convirtiendo los centros formativos en espacios seguros para la infancia racializada», han expuesto.

En cuanto al «antigitanismo y la ijitofobia», han exigido «políticas reales» que condenen este tipo de discriminación y a la vez que se repare el daño causado al pueblo gitano, «que se nos reconozca y visibilice». «¡No queremos asimilarnos ni que nos asimilen!», han enfatizado.