Martxelo Diaz
Aktualitateko erredaktorea / redactor de actualidad

Fallece Jabier Salutregi, periodista siempre y encarcelado por dirigir ‘Egin’

Jabier Salutregi Mentxaka, último director del diario ‘Egin’ antes de su cierre hace casi 25 años, ha fallecido. Se va un periodista en mayúsculas, comprometido hasta el fondo con dar «voz a los sin voz», un abertzale que sufrió cárcel y se convirtió, a su pesar, en icono de la libre expresión.

Jabier Salutregi, en una entrevista ante la sede del clausurado policialmente ‘Egin’.
Jabier Salutregi, en una entrevista ante la sede del clausurado policialmente ‘Egin’. (Jon Urbe | Foku)

Nacido en 1950 en Bilbo, Jabier Salutregi ha fallecido en su domicilio de Donostia a consecuencia de la enfermedad que ha marcado sus últimos meses, tras poder despedirse de sus allegados. Cariñoso y testarudo a partes iguales, bromista y ácido a la vez, periodista a tiempo completo, así era como se definía él mismo en esta última etapa de la vida: «Periodista, expreso, ex de muchas ilusiones, pertinaz en convicciones y a favor de extender el buen vivir. Acepto al otro».

Los restos mortales de Jabier Salutregi serán conducidos al tanatorio de Gernika, donde permanecerán toda la jornada del jueves; el viernes será incinerado en Ispaster y el sábado tendrá lugar el entierro en el panteón familiar de Ea, según han informado sus allegados a NAIZ.

‘Salu’ fue uno de los periodistas que participó en la creación de ‘Egin’ en 1977, accediendo a la dirección en 1993 e impulsando un intenso proyecto de renovación del diseño y del concepto del medio. En la época previa al cierre, ya tuvo que hacer frente a una intensa campaña de criminalización del medio.

Salutregi contó la dura realidad del país en ‘Egin’ desde su inicio en 1977 y fue su director en sus cinco últimos años, hasta el cierre luego admitido como ilegal

 

Acabaría encarcelado por desarrollar su labor periodística y condenado en el juicio por el macroproceso 18/98, que tuvo como base la tesis desarrollada por Garzón del «todo es ETA», por lo que se criminalizaron y persiguieron múltiples actividades sociales, sindicales y políticas en Euskal Herria. El juicio oral se prolongó durante 16 meses y la Audiencia Nacional tuvo que habilitar unas dependencias específicas en la Casa de Campo ante el elevado número de procesados.

Salió de la prisión de Burgos en 2015, tras haber permanecido encarcelado siete años, siempre fuera de Euskal Herria: Alcalá, Soto del Real, València y Burgos. En esos momentos, era el único preso en Europa por dirigir un periódico, como remarcó este artículo que ubicaba su caso en el marco internacional.

 

«La pesadilla ha terminado ahora, después de 17 años. Siempre la recordaré pero intentaré hacerlo sin dolor. Solo espero que este pueblo, que viene todavía a las cárceles, deje de venir para que no tenga que sacar absolutamente a nadie más», afirmó tras dejar atrás los barrotes.

En el exterior le esperaban sus allegados, vecinos de Ea, y compañeros de la dirección de ‘Egin’ como los periodistas Martin Garitano, Mertxe Aizpurua, Iñaki Iriondo y Fermin Munarriz, además del director de GARA, Iñaki Soto. También estuvieron a las puertas de la cárcel de Burgos otros condenados y encarcelados por el cierre de ‘Egin’ como Teresa Toda, José Luis Elkoro, Pablo Gorostiaga, Patxo e Isidro Murga y Jesús Mari Zalakain. 

En una primera sentencia, Jabier Salutregi fue condenado en diciembre de 2007 a doce años en el marco del macrosumario 18/98. Las penas más altas recayeron en varios de los procesados en relación a las empresas del grupo Orain, que era la editora del diario.

Seis meses más tarde, cuando se iba a cumplir el décimo aniversario del cierre, Salutregi salió en libertad bajo fianza de 6.000 euros. Entonces, al igual que ha hecho durante todo este tiempo, denunció la «animalada» que supuso el cierre de este medio de comunicación.

El tiempo y los propios tribunales españoles le dieron la razón. En mayo de 2009, el Tribunal Supremo redujo las condenas y dejó sin efecto la declaración de ilicitud de actividades y la disolución de Orain SA y del resto de empresas dedicadas a la edición de Egin y Egin Irratia.

Para entonces, tanto Salutregi como sus compañeros ya habían sido nuevamente detenidos y encarcelados, antes de que se conociera la sentencia definitiva del Alto Tribunal.

Marcado por la muerte de Muguruza

Según explicó en una entrevista concedida desde la cárcel a Iñaki Altuna, el momento más duro que vivió como director de ‘Egin’ fue el 20 de noviembre de 1989, cuando mataron en Madrid a Josu Muguruza, compañero en la dirección del diario y diputado. «Sentí con rotundidad, hasta entonces por mí desconocida, lo que era la pérdida y el desvanecimiento total de los sentimientos más consistentes que se pueden experimentar en el transcurso de la vida. La muerte de Josu me arrancó de cuajo la alegría de los ideales y me sumió a otro nivel más profundo de mi vitalidad», explicaba. Hoy, Ane, hija de Josu, ha querido recordar la carta que Salu le escribió un año después.

«Desde que nació, ‘Egin’ fue diana y objetivo a destruir. Su irrupción en el panorama comunicativo vasco no fue un paseo por una glamurosa alfombra roja», añadía. «Durante años, la guerra contra el periódico se sustanció en un constante intento de ahogo económico empresarial mediante el nada sutil método de la no concesión de publicidad institucional, una práctica que los gobiernos del PNV impusieron con obstinación visigoda: es decir, sin lograr dominarnos nunca y que, por oposición, demostraba la domesticación de los demás medios de comunicación que sí recibían inserciones de publicidad», rememoraba.

«La cárcel es jodida, para qué vamos a decir tonterías. Todas las cosas que has dejado fuera te parecen estúpidas. Y en fin... quieres más a la gente»

 

Por lo que atañe al paso por la cárcel, no le dolían prendas en reconocer su dureza en otra entrevista a Mertxe Aizpurua en GARA en 2015: «La cárcel es jodida, para qué vamos a decir tonterías. Haces amistades de hierro, tienes tiempos de mucha introspección y hay que tener voluntad para estudiar, para leer, para dominar la rabia. Pones en marcha tus mecanismos de defensa, alzas muros para no hipersensibilizarte y relativizas mucho todo. Las cosas que has dejado fuera, los malos genios, las malas leches y todas esas cosas te parecen estúpidas. Y en fin... quieres más a la gente».

El cierre del diario y el paso por la cárcel taparon desgraciadamente su impronta como periodista. «Siempre me ha gustado jugar con los significantes y los significados, con intencionalidad y la ambigüedad del lenguaje, con la complicidad del interlocutor, con su memoria, con su inteligencia, con las suposiciones, con la inferencia, con lo implítico, con los sobreentendidos. Además, quiero pensar que los lectores son inteligentes», explicaba sobre algunos titulares de portada de ‘Egin’ en los que dejó su sello.

Agur, Salu

Tras conocerse la noticia, las redes sociales han hecho la labor de epitafio, con numerosos compañeros de profesión, políticos y ciudadanos despidiendo a Salu. La diputada y exdirectora de GARA, Mertxe Aizpurua, ha recordado el trabajo realizado junto a su «maestro, amigo, director». «Se me hace imposible poner nombre a este sentimiento de quedarme huérfana. Egin, lo hicimos. GARA, lo hicimos desde eso que somos. Y si, de nuevo, debemos hacerlo, lo haremos».

 

Teresa Toda, subdirectora de ‘Egin’ cuando se clausuró el diario y quien pasó seis años en prisión, también le ha recordado en redes sociales. 

Arnaldo Otegi, coordinador de EH Bildu, también ha recordado la figura de un «amigo y camarada, periodista y preso político» Salutregi.

También han recordado su papel como «actor» en la segunda parte de ‘Black is beltza’, el trabajo de Fermin Muguruza.