Artificieros han detonado este miércoles un antiguo artefacto explosivo de la guerra de 1936 que se encontraba sumergido en la bocana de acceso a la bahía de Pasaia.

Según han informado a Efe fuentes portuarias, el artefacto fue detectado el martes por un buceador del centro de buceo Donosti, que alertó al Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

Buceadores comprobaron este miércoles la existencia de la bomba, un proyectil aproximadamente de 1,40 metros de largo por 1 metro de perímetro, cubierto de sedimentos y situado a una profundidad de 23 metros, próximo a la señalización lateral de acceso a la bocana de Pasaia.

Tras señalizar adecuadamente la zona para advertir a otros posibles buceadores, se comunicó la incidencia al Centro de Operaciones y Vigilancia de Acción Marítima de la Armada española (COVAM), con sede en Cartagena, que decidió desplazar al Grupo de Desactivación de Explosivos (GEDE) de la Unidad de Buceo de Ferrol (UBUFER).

En un comunicado, la Delegación del Gobierno español en la CAV ha explicado que los especialistas militares han empleado un procedimiento denominado «contraminado», que, al parecer, genera un menor impacto sobre el ecosistema marino. Esta técnica consiste en el desbaratamiento del material interno que contiene el proyectil, lo que evita explosiones de mayor entidad.

Afección al tráfico portuario

A consecuencia de esta intervención, el tráfico portuario y toda la actividad acuática de la dársena han quedado interrumpidos en la bahía entre las 12.30 horas y las 14.00 horas.

Según ha informado el Ayuntamiento de Pasaia en redes sociales, la Policía Municipal ha indicado a los bañistas que se encontraban en las proximidades que salieran del agua y el servicio de motoras que une los distritos pasaitarras de San Pedro y Donibane ha cesado temporalmente.

Pasado el mediodía, varias embarcaciones de la Guardia Civil con base en el puerto pasaitarra, a la que se han unido efectivos de los Tedax llegados desde Ferrol se han desplazado al lugar del hallazgo, donde varios submarinistas y artificieros especializados han llevado a cabo la detonación sin que se hayan registrado incidentes de relevancia y sin que ésta haya sido apreciable desde fuera del agua.

Sobre las 14.00 horas, la actividad portuaria y el servicio de motoras han recuperado la normalidad.