Solo el 32 % de la ciudadanía del Estado español veía a Pedro Sánchez como próximo jefe del Ejecutivo una semana antes de las elecciones el 23 de julio, frente al 51,6 % que creía que Alberto Núñez Feijóo sería nuevo presidente de un Gobierno de coalición.

El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha difundido este jueves un estudio sobre la tendencia de voto que hubo la última semana antes de ir a las urnas y lo que motivó a los electores a votar a los candidatos. Sobre una muestra cercana a las 27.000 personas apunta además que casi 9 de cada 10 encuestados tenían claro que habría un gobierno del PP en coalición o en solitario.

Desde el día 17 de julio hasta el 22, un día antes de ir a votar, cinco de cada diez encuestados creían que Feijóo sería el próximo presidente del Gobierno, mientras que tres de cada diez consideraban que sería Sánchez, aunque la tendencia del actual presidente en funciones fue de menos a más en los últimos diez días y la de Feijóo bajó algunas décimas el día antes de ir a las urnas.

No obstante, una cosa eran las previsiones y otras los deseos. Y es que cuando se preguntaba por quién preferían los encuestados que fuera el próximo inquilino de La Moncloa, el 36 por ciento optaba por Sánchez frente al 28,7 por ciento que escogía a Feijóo.

Voto por correo e intención de voto

El CIS preguntó también a quién habían votado las personas que en esas fechas ya habían ejercido su derecho a través del correo. Más de la mitad de los encuestados en esa situación optaron por partidos de la izquierda (30,9% al PSOE y 20,6% a Sumar), frente al 26,3% que votó al PP y el 7,8% a Vox.

Si se suman los votos declarados por correo y la intención de voto, en la semana previa a las elecciones el PSOE contaba con el 28,3 por ciento de los apoyos, el PP con el 24,8 por ciento, mientras que Sumar se situaba como tercera fuerza (14,1 %) y Vox como cuarta (9,4 %). Algo que coincide básicamente con el último sondeo publicado por el CIS y que fue el único de los potentes que acertó en que el bloque de izquierda aguantaría el embate de la derecha.

Finalmente el resultado de las elecciones indica que el 33% votó al PP, el 31,7% al PSOE, el 12,39% a Vox y el 12,31% a Sumar.

Según el CIS la motivación de los votantes de Vox fue en ascenso en los últimos diez días, mientras que la de los votantes del PSOE y del PP muestra altibajos la última semana.

Por su parte, la actitud de las personas que iban a votar a Sumar también fue en ascenso dos días antes de abrirse las urnas, al llegar al 15,6%.

Otro dato que señala el CIS es que ocho de cada diez encuestados estaban decididos a ir a votar y según fueron pasando los días esta motivación iba siendo mayor.

El 22 de julio, el 83,2 % de los encuestados afirmó que votaría con toda seguridad, aunque finalmente la participación se quedó en el 70,4 %.

Identificación con los partidos y motivaciones

De todas los entrevistados, casi el 27% opinó que el PSOE era el partido con propuestas que más se aproximaban a su ideal de sociedad, mientras que el 22,6% pensaba lo mismo respecto a las del PP.

No obstante, estos pensamientos fueron perdiendo intensidad en los electores de ambas formaciones según finalizó la semana. Todo lo contrario que lo que ocurrió con Sumar y Vox, cuyos electores se reafirmaron en las propuestas de sendos partidos con más intensidad en los últimos días.

Por otra parte, ante la pregunta de qué es lo que ayuda más a decidir a quién votar, casi 7 de cada 10 encuestados tienen claro que «apoyar las propuestas políticas que sí le gustan» frente a «oponerse a las propuestas que no le gustan», algo que motiva solo al 17,5% de los encuestados.