Estruendo multitudinario en Gernika contra el proyecto de Guggenheim en la reserva de Urdaibai

Una ruidosa movilización ciudadana ha reclamado esta tarde en Gernika que se detenga el proyecto de construcción de un segundo museo Guggenheim en plena reserva de la biosfera de Urdaibai. Preocupa el «enorme impacto» de un museo que «no responde a necesidades» de Busturialdea.

Silbatos, cacerolas, maracas... han sonado con contundencia está tarde en las calles de Gernika elevando el volumen del rechazo ciudadano al proyecto de dos nuevas sedes del Museo Guggenheim en Urdaibai. La fuerza de la protesta se ha podido visualizar, además, en una gran manifestación, que ha contado con participación más allá de la ciudadanía de Busturialdea.

Organizaciones ecologistas, numerosos colectivos y agentes socioculturales han respaldado la convocatoria, en la que han podido verse banderas de Palestina, y que ha contado, asimismo, con el apoyo de personas a título individual. Entre los apoyos recibidos se encuentran los de rostros conocidos del mundo de la cultura. El cantante Eñaut Elorrieta, los componentes del grupo Gatibu, el escritor Edorta Jimenez, la expresentadora de ETB Ana Urrutia o el dibujante Javier Etayo, Tasio, han respaldado la demanda de la plataforma ciudadana.

Muchos de ellos y ellas han estado esta tarde en la movilización, en la que también han participado, por ejemplo, el conocido activista Paul Nicholson o el catedrático de la UPV/EH Iñaki Antigüedad, por citar sólo algunos.

En el plano político, la marcha ha contado con una amplia representación de EH Bildu, así como Sortu y otras formaciones de la coalición. Elkarrekin Podemos también se ha sumado a la protesta, aunque portavoces de la plataforma Guggenheim Urdaibai Stop no han ocultado su malestar por la contradicción que supone que la formación apoye la movilización aquí pero como parte del Gobierno español no haya impedido la transferencia al proyecto de 40 millones de euros a través del Ministerio de Transición Ecológica. Según han señalado a NAIZ, así se lo han transmitido a la delegación de la formación morada tras anunciar su apoyo a la protesta.

En Busturialdea preocupa el enorme impacto que el proyecto tendría en un espacio de especial protección como es la Reserva de la Biosfera. Del plan de actuación se conoce que constará de dos edificios, uno en Gernika Lumo, en los terrenos de la antigua empresa de cubiertos Dalia, el segundo en Atilleros Murueta, unidos por una ‘vía verde’. Unos 60.000 metros cuadrados entre ambos, indican desde la plataforma. Pero el proyecto no se conoce al detalle. No se ha presentado en su totalidad a la ciudadanía de la zona, ni se le ha dado la posibilidad de pronunciarse sobre el mismo, según denuncian.

A este respecto desde la plataforma han explicado que este proyecto se está gestionando en siete partes, de forma que se está abordanfo de forma parcial pero no en su integridad.

Temen que los planes de la Fundación Guggenheim con el apoyo político y económico de la Diputación de Bizkaia, y los gobiernos español y de Lakua sigan avanzando silenciosamente, mientras en la calle lo que se va conociendo son pinceladas «a través de noticias de prensa en algunos medios».

Al término de la marcha, ante una abarrotada Foruen Plaza, el bertsolari Aitor Zarraga Ana Urrutia han leído un comunicado en el que han reclamado la apertura de una reflexión y disdnostico en profundidad de las necesidades de la comarca.

Además del efecto de las obras, que se dilatarían durante años, hay un dato que hace saltar las alarmas, la atracción anunciada de unos 140.000 visitantes. Para los residentes en la comarca, que conocen de cerca la lucha por la protección de sus espacios naturales y la normativa que debería protegerlos, el proyecto no tiene cabida ni con arreglo a la reglamentación de la Reserva de la Biosfera ni por simple sentido común, atendiendo al especial cuidado y atención a la regeneración de zonas especialmente sensibles como son los propios humedales de Urdaibai, junto a los que se construiría uno de los dos edificios del proyecto.