Aitor Agirrezabal
Aktualitateko erredaktorea / redactor de actualidad

A «la España que madruga» le cuesta desperezarse en Euskal Herria

Organizaciones de derecha y ultraderecha han realizado importantes protestas en el Estado español contra la Ley de Amnistía. Sin embargo, la plaza del Castillo de Iruñea le ha quedado grande a la derecha navarra. En el resto de capitales de Hego Euskal Herria ni siquiera ha habido convocatorias.

La concentración de Sociedad Civil Navarra contra la amnistía ha ocupado menos de la mitad de la plaza del Castillo.
La concentración de Sociedad Civil Navarra contra la amnistía ha ocupado menos de la mitad de la plaza del Castillo. (NAIZ)

El sol brillaba en lo alto, pegaba en la cara, el reloj pasaba en más de 10 minutos las 12:00 cuando ha comenzado el acto. Todo acompañaba para que la derecha y la ultraderecha mostrase en Iruñea el músculo que ha presentado en las movilizaciones recientes por el Estado español. Sin embargo, ha pinchado.

UPN, PP y Vox, junto a diversas asociaciones, habían llamado a secundar la convocatoria de Sociedad Civil Navarra y, según la Delegación del Gobierno español, se han reunido 7.500 personas.

Mientras en Madrid este sábado se han vuelto a ver imágenes multitudinarias (170.000 personas según la Delegación del Gobierno español) encabezadas por los líderes del PP, Alberto Núñez Feijóo, y el de Vox, Santiago Abascal, la plaza del Castillo ha quedado demasiado grande para la concentración ‘Por la libertad, la unidad y la igualdad’ convocada por Sociedad Civil Navarra, que no ha llenado ni la mitad sur de la plaza. En la mitad norte, jubilados al sol y treintañeros de despedida de soltero, comentaban la jugada.

Cuestionados por NAIZ, cuatro asistentes a la concentración que, ataviados con sus banderas navarras y españolas, esperaban al inicio de la movilización en uno de los solicitados bancos de la plaza, han esgrimido, entre otros, los siguientes motivos para salir hoy a la calle: «Parar los pies a un intento de golpe», «alta traición» y «decirle al amigo de los etarras (Sánchez) que España ha despertado».

Sánchez, Puigdemont y los de Leitza

Antes de comenzar la concentración y junto a las reiteradas llamadas a ocupar la parte más cercana al kiosco con el objetivo de ofrecer una mejor fotografía, desde los megáfonos se ha remarcado que esta era «una concentración cívica y pacífica». De hecho, desde el micrófono se ha acallado cualquier cántico que se desviase lo más mínimo de ahí.

«No en nuestro nombre. Ni amnistía ni autodeterminación», han resumido una vez iniciado el acto en el que la palabra más repetida ha sido «golpe». También se ha querido aplaudir a «los héroes de Leitza», presentes hoy en Iruñea y que el académico Pérez Reverte utilizó para su particupar definición de «tener cojones».

Sin embargo, el mayor abucheo se lo ha llevado el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, «verdadero ideólogo de los males que nos acechan». Por encima de Sánchez y Santos Cerdán y su «foto de la vergüenza» con Puigdemont.

Vox quiere coordinarse con el PP

En Madrid el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha exigido al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que «no levante muros» entre españoles y, aunque ha alertado de que «las alarmas de la democracia están encendidas», ha pedido a la ciudadanía que no tenga «miedo» porque «España es un sistema democrático» y ha garantizado que su partido no va a dejar de «denunciar» los «atropellos» del PSOE y sus socios independentistas.

Abascal ha ido más allá y ha calificado la Ley de «fin de la democracia» y ha pedido una reunión al presidente del PP para «coordinar la respuesta institucional» frente al «golpe» de Pedro Sánchez.

Por su parte, el líder del PP en la CAV, Javier de Andrés, que también se ha trasladado a la capital española, afirmaba que la norma «da pie a Urkullu a pedir la autodeterminación»