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Incertidumbre en la planta principal de Talgo, en Ribabellosa, tras el rechazo a la opa húngara

El martes el Gobierno español rechazó una opa presentada por el grupo húngaro Magyar Vagon sobre Talgo, cuya fábrica principal, con 700 trabajadores, se encuentra en Araba, en Ribabellosa. Según el presidente del comité, no han recibido ninguna noticia de la dirección y esperan mantener sus empleos.

La fábrica de Ribabellosa es la principal de Talgo, con 700 trabajadores.
La fábrica de Ribabellosa es la principal de Talgo, con 700 trabajadores. (Google Maps)

Tras el rechazo del Gobierno español a la opa de Magyar Vagon sobre la empresa española de fabricación de trenes Talgo, los trabajadores de la principal fábrica, que se encuentra en Ribabellosa, han explicado que están «a la espera de que aclare la situación».

El Gobierno español hizo público el martes su veto a la entrada del grupo húngaro en Talgo, sobre la que había lanzado una opa para controlar el 100% de su capital por 620 millones de euros, por considerar que hay intereses estratégicos y «razones de seguridad nacional insalvables».

Después de la negativa de Madrid, que deja el futuro de Talgo en el aire, el consorcio húngaro ha anunciado que recurrirá «en todas las instancias posibles» la decisión, tanto en el Estado español como en Bruselas.

Según ha explicado el presidente del comité Kepa Alcaine este miércoles en Radio Vitoria, «no hemos tenido ninguna noticia» por parte de la dirección de la empresa y están «a la espera de que se aclare la situación».

Alcaine ha añadido que lo que esperan los trabajadores es que no se pongan en riesgo los 700 empleos de la fábrica y ha dejado claro que «queremos que esta fábrica siga creciendo en personal, seguir manteniendo los puestos de trabajo y quedarnos aquí».

En declaraciones a EFE Televisión, el también representante de CCOO en la fábrica ha explicado que Talgo da empleo directo a unas 2.500 personas en el Estado español, de las cuales 700 trabajan en Ribabellosa, por lo que «interesa que se quede».

En la actualidad hay «muchísima» carga de trabajo y la planta «tiene la capacidad que tiene, no puede fabricar mucho más», explica Kepa Alcaine. Por ello, considera que la dirección debe decidir «qué tipo de socio quiere», si un socio inversor que ponga dinero para ampliar las actuales instalaciones y poder producir más o un socio industrial para fabricar en otros lugares.

Los trabajadores están «a la expectativa», pero reclaman «que se sigan manteniendo las fábricas y los puestos de trabajo en España», ha resumido Alcaine, que ha pedido al Gobierno que se reúna con los sindicatos para informarles sobre su postura en este tema.

«Nerviosismo»

Por su parte, David Serrano, también de CCOO, ha explicado que la plantilla de Talgo vive con «cierto nerviosismo» todo lo relativo a la opa del grupo húngaro y al veto del Gobierno de España. «Cuanto más se tarde en el proceso, más nerviosismo, y no será bueno para los trabajadores, para la empresa ni para los accionistas», ha advertido.

El sindicalista ha asegurado que hasta la fecha la dirección de Talgo les «transmite tranquilidad», les dice que los puestos de trabajo están «asegurados» y que «trabajarán para que siga así». Sin embargo la plantilla quiere «saber qué va a pasar» y pide que se garantice la viabilidad de la empresa y la continuidad del empleo.

Desde 1966

La actividad de la planta de Talgo en Ribabellosa empezó hace más de 60 años, en 1966. Desde esta fábrica se construyen trenes de alta tecnología para varios continentes y también se esta desarrollando el que será el primer tren de hidrógeno del Estado español, el Vittal One.

Otro de los hitos tecnológicos salidos de esta planta es el Talgo Avril, que es capaz de transportar a más de 600 viajeros a 330 kilómetros por hora. Así, es el tren de muy alta velocidad más ligero del mundo, lo que unido a su capacidad, permite un bajo coste energético por viajero. Además, se trata del primer tren del mundo con capacidad para circular a más de 300 kilómetros por hora tanto en ancho ibérico como en ancho internacional. Esta tecnología de adaptación a diferentes anchos de vía es una de las particularidades de Talgo.