«No puedes reemplazar a Victor Wembanyama». Son palabras del base de los San Antonio Spurs Chris Paul, base, compañero de equipo y «socio» del ala-pívot francés, quien se va a perder lo que resta de temporada a causa de una «trombosis venosa profunda» que afecta al hombro derecho de ‘Wemby’, una anomalía detectada al jugador durante el All-Star que se celebró en San Francisco el pasado fin de semana.

En Wembanyama, número 1 del draft de 2023, todo es excepcional. Lo son sus 2,23 metros de estatura, lo es su versatilidad, siendo capaz de dominar al poste bajo, con el tiro de tres y hasta con el bote, lo es la madurez con la que juega a sus 21 años y como no podía ser de otra forma, lo es la anomalía que lo dejará fuera de circulación durante un tiempo indeterminado.

El especialista en medicina deportiva Hythem Shadid ha analizado para Efe las causas y consecuencias de este percance que solo en un 10% de los casos ocurren en la parte alta de un brazo y que es aún más extraño que afecte a deportistas tan jóvenes.

«No se conocen muchos detalles y es importante tener cuidado antes de sacar conclusiones precipitadas. En general, una trombosis en la parte alta del brazo es muy rara. Solo un 10% de estos percances se registran en esa zona del cuerpo. Normalmente, ocurre por un trauma, una lesión de alguna forma, pero también puede ser metabólica», afirma Shadid, doctor y cirujano especializado en medicina deportiva del Genesis Orthopedics & Sports Medicine de Chicago, con más de 30 años de experiencia trabajando en la selección de fútbol de Estados Unidos así como en distintos equipos universitarios estadounidenses.

Paso a paso

Lo primero que hay que procurar es «evitar complicaciones». «Lo primero es conseguir un anticoagulante para estar seguros de que el coágulo no se mueva. No hay garantía de que no llegue a los pulmones, y si lo hace puede tener serias complicaciones», subraya el especialista a Efe.

«Hay varias maneras para eliminar el coágulo. Normalmente, se trata con un anticoagulante. En el caso de Wembanyama, al recibir muchos golpes en el campo, es importante que tenga cuidado antes de volver a la pista», añade, al tiempo que observa un matiz clave para entender el deporte de élite. «Muchas veces los deportistas no tienen el lujo del tiempo para recuperarse».

El doctor Shadid informa que, en estos casos, normalmente se realiza un venograma, un procedimiento diagnóstico por imágenes «para entender exactamente dónde está el coágulo». «La decisión sobre el tratamiento depende de cuánto es de grande el coágulo. Hay que decidir si se elimina directamente en la vena. En ese caso hay un pequeño aparato que se hace pasar por la vena para extraer el coágulo de la zona. Es una de las posibles medidas», indica.

Como queda dicho,, lo anómalo del caso levanta todavía más dudas y alarmas en el caso, más aún en una estrella de la NBA con todas las de la ley, desde su desembarco a la mejor liga de baloncesto del mundo en 2023, luego de que en su último año en Europa, los medios de difusión estadounidenses emitieron para todo el país norteamericano todos y cada uno de los partidos del equipo de la Liga Francesa Metropolitans 92, para ver las evoluciones del «unicornio» galo.

«Es muy raro», subraya Hythem Shadid. «El hecho de que lo tenga un chico de 21 años es muy poco común. En un caso de este tipo, preguntaría al paciente si se ha sometido a operaciones o si ha sufrido una lesión significativa», reflexiona.

Wembanyama empezó a notar algunos síntomas, según una información de la cadena 'ESPN', en el reciente All-Star Weekend, pero lo cierto es que en su primer año y medio de NBA no había tenido problemas físicos destacados.

«En personas muy altas puede haber un nivel de tejido arterial que potencialmente podría ser una causa», reconoce el doctor Shadid.

«Se trata de problemas que no se toman a la ligera. Cuando operamos en un hombro, solemos pedir al deportista que tome una aspirina porque ayuda a prevenir coágulos», añade el cirujano deportivo.

Echando la vista atrás, aunque este tipo de problemas sea muy raro, Wembanyama no es el primer jugador de la NBA en afrontarlo. Chris Bosh, doble campeón de la NBA con los Miami Heat y medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, terminó retirándose de la NBA en 2017, con 33 años, tras sufrir unos coágulos en 2015 y 2016.

Brandon Ingram, ahora jugador de los Toronto Raptors y ex de los Lakers y los Pelicans de Nueva Orleanbs, se perdió 19 partidos en la temporada 2018/19 por un problema similar, aunque no ha vuelto a reportar similares problemas.

La vida sigue

Hasta perder a su jugador franquicia, los San Antonio Spurs, un equipo que poco a poco va completando su reconstrucción, estaba peleando por meterse entre los diez primeros de la Conferencia Oeste y jugar al menos el play-in previo a las eliminatorias de postemporada. En estos momentos la franquicia texana tiene un balance de 24-29, duodécimo del Oeste, pero a cuatro partidos de diferencia de los Golden State Warriors, que ocupan la ansiada décima plaza.

En esa carrera por superar la Fase Regular, Wembanyama estaba promediando esta temporada 24,3 puntos, 11 rebotes, 3,7 asistencias y 3,8 tapones por partido.

Los Spurs han tenido que jugar ya última jornada sin su jugador franquicia, pero al menos han podido dedicarle el triunfo, 120-109, ante los Phoenix Suns –uno de sus rivales directos para meterse en puestos de play-in–, con 13 tantos y 10 asistencias de Chris Paul.

«No puedes remplazar a 'Vic'. No puedo subirme al hombro de un jugador y hacer tapones. Al margen de su habilidad, el baloncesto, su carisma y lo que aporta dentro del vestuario es lo que más vamos a echar de menos», ha concluido el veterano base de 39 años ante la ausencia de la estrella de su equipo.

«El baloncesto es lo que hacemos, no lo que somos. La vida es mucho más importante. Para nosotros, sabemos que perdemos una gran parte del equipo», ha sentenciado Chris Paul.

Mientras, también desde este lado del Atlántico se echan las manos a la cabeza. Si bien la temporada 2024/25 de Wembanyama con los Spurs probablemente ha terminado, el ala-pívot podría, en teoría, regresar a tiempo para jugar el Eurobasketcon los ‘Bleus’, que se disputará del 27 de agosto al 14 de septiembre entre Letonia, Chipre, Finlandia y Polonia. Naturalmente, la evolución de la anomalía que afecta a ‘Wemby’ y la disposición de ceder a su jugador de los Spurs dictarán sentencia cuando llegue el momento.

A finales de enero, el presidente de la Federación Francesa de Baloncesto, Jean-Pierre Huckler, afirmó que Wembanyama estaría en el Eurobasket, «salvo en caso de lesión».