Más de 30 miembros y exmiembros de la dirección de Gure Esku se han dado cita en Arantzazu para analizar el contexto político actual y los detalles de la movilización nacional convocada para el 7 de junio en Bilbo. Durante el encuentro, han coincidido en que «existe la oportunidad de dar un salto como pueblo y, por lo tanto, debemos aprovechar dicha oportunidad», al tiempo que han destacado la necesidad de «unir fuerzas y reivindicar que queremos ser un pueblo libre y decidir entre todos y todas».

En la reunión han participado 31 miembros y exmiembros de la dirección, entre ellos el actual portavoz, Josu Etxaburu, y los anteriores, Zelai Nikolas y Angel Oiarbide. Los asistentes han repasado los 12 años de trayectoria del movimiento y han señalado que «nuestra tierra, el euskara y la cultura vasca no están tan fuertes como nos gustaría, no están libres de amenazas».

Según Etxaburu, «carecemos de medios para velar adecuadamente por nuestros derechos, para abordar los retos actuales a nivel mundial y para construir un futuro más igualitario, justo, equilibrado y sostenible».

En relación con el debate sobre el estatus político y la organización territorial, han resaltado que «debe servir para construir un pueblo libre en el que la ciudadanía vasca se gobierne a sí misma» y que «es el momento del reconocimiento de Euskal Herria como nación y de avanzar en el camino hacia la plena soberanía».

Finalmente, Gure Esku ha llamado a «aunar fuerzas y mostrar la voluntad de nuestra ciudadanía», apostando por la «ambición y la esperanza colectiva». En ese sentido, han destacado que la cita del 7 de junio será un «hito para reivindicar el derecho a decidir libre y democráticamente» y la necesidad de «nuevos espacios de soberanía».