
El sindicato LAB ha presentado este lunes el estudio Ikusmiran, realizado por la fundación Ipar Hegoa. Con él, muestran «la realidad que se oculta detrás de lo que llaman absentismo». Según LAB este problema es «inventado y provocado por una patronal que defiende los intereses del capital, que es el causante masivo de accidentes y el principal generador de enfermedades profesionales».
En la comparecencia para presentar el informe, se han referido al discurso del absentismo como «cortina de humo» para recortar derechos y para ocultar la «verdadera lacra» que es la precariedad de las condiciones laborales y de vida, que advierten que sufre la mitad de los ciudadanos de Euskal Herria.
Según han explicado, la tasa de absentismo es residual, porque el número de trabajadores que realmente falta a su puesto sin justificación «no es significativo». Sin embargo, la mayor parte del llamado absentismo se refiere a bajas relacionadas con salud laboral, permisos parentales u horas sindicales, entre otras cosas.
En concreto, según datos citados por LAB de 2024, las bajas representan el 75% del absentismo, los permisos de paternidad y maternidad el 11,7% y las horas sindicales el 0,4%.
Han denunciado también que muchas de las horas extra no se pagan a los trabajadores. Según sus datos de 2020, el 63,58% de estas horas quedaron sin pagar y entre la población asalariada el 26,8% realiza horas extra sin pagar. Esto, según LAB, supone un ahorro de casi 4.000 trabajadores para la patronal.
Sistemas de salud y prevención deficientes
Además, el sindicato señala que una de cada dos personas en Euskal Herria vive una situación de precariedad a pesar de tener trabajo, sumado a los recortes en el sistema sanitario, porque las listas de espera y las concertaciones sanitarias «empeoran la calidad del servicio» y las enfermedades laborales aumentan.
Con esto, consideran que el sistema de prevención «no funciona correctamente». Según Osalan, el aumento de las enfermedades profesionales en abril de 2025 ha sido del 8,8%, aunque los servicios de prevención comunican estos casos «cada vez menos» y «silencian el daño derivado del trabajo».
También han interpelado a las mutuas por su «papel activo» en la defensa de los intereses de las empresas. Han explicado que clasifican las dolencias laborales como contingencias comunes y así si el trabajador decide hacer un cambio de contingencia puede pasar un año en juicios. «Este es el verdadero fraude masivo», dice LAB.
«También hay que denunciar el presentismo», han manifestado. Según el sindicato, muchos trabajadores no hacen uso de sus derechos, no disfrutan de los permisos o, a pesar de estar enfermos o enfermas, acuden al trabajo «para evitar represalias de la empresa». «Mientras se habla del absentismo, esta realidad presente sigue en secreto a pesar de las graves consecuencias para la salud y las relaciones laborales».
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia

El primer festival Aske pone la banda sonora a una Euskal Herria libre

La Ertzaintza deja impune la desaparición del test de drogas del hijo de un jefe policial

Mueren tres esquiadores, uno vasco, por un alud junto a los ibones de Brazato (Panticosa)
