
Presentado en el Festival de Cannes (Sección Acid) y en el WIP Latam de Zinemaldia, el segundo largometraje del director y guionista Iair Said, que también protagoniza la historia, está basado en sus propias reflexiones tras la muerte de su padre. Con una visión autoral y un toque de humor característico, se sumerge en la pregunta fundamental: ¿Cuál es el precio que debemos pagar aquellos que quedamos vivos?
El protagonista es David, un joven judío de clase media. A causa del fallecimiento de su tío, David se ve obligado a volver de Europa a Buenos Aires. En este viaje, se entera de que su madre ha tomado la decisión de desconectar el respirador que lleva años siendo lo único que mantiene con vida a su padre.
En su viaje vuelve a la que fue su casa durante su infancia, ahí tiene que mantenerse a flote entre la convivencia íntima con su madre y una necesidad voraz por llenar su angustia existencial.
Mientras van avanzando los días y va pasando su tiempo en Buenos Aires, él va a intentar evitar de todas las maneras posibles ver de nuevo a su padre ingresado, aunque el destino y la vida harán todo lo que se pueda imaginar para que ocurra ese encuentro.

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